UGT ha pedido este miércoles dar un empuje al convenio colectivo que afecta a las trabajadoras de las residencias privadas y concertadas, un total de 15.000 personas en toda Castilla-La Mancha. Desde el sindicato han apuntado que estas plantillas llevan con el salario congelado desde diciembre de 2018, desde que caducó el VIII Convenio Marco Estatal de Servicios de Atención a las Personas Dependientes por el que se regulan sus condiciones laborales.
Así lo ha puesto de manifiesto en Toledo la responsable del sector Sociosanitario de UGT Servicios Públicos CLM, Esther Soto, quien ha intervenido en la inauguración de la Asamblea General de la Asociación de Castilla-La Mancha de Residencias y Servicios de Atención a los Mayores (Acescam).
Esther Soto también ha trasladado varias reivindicaciones a la Junta de Comunidades, a la que ha exigido mejorar, tanto las ratios de profesionales por usuario, como la orden de mínimos que deben cumplir estos centros. “Pedimos una orden y unos requisitos que no sean tan sumamente mínimos. A estas trabajadoras no se las puede pedir más de lo que dan”, ha señalado.
UGT Servicios Públicos Castilla-La Mancha ha aprovechado la Asamblea General de Acescam para poner en valor el esfuerzo y la dedicación de las trabajadoras de las residencias de mayores y es que “no se les puede pedir más de lo que han dado y de lo que dan; trabajan como auténticas bestias. Que menos que se les reconozca su trabajo”.
