El comité de empresa de Bienestar Social en Ciudad Real exige que se hagan test rápidos y masivos para detectar el Covid-19, no solo a los internos en las residencias, sino a los trabajadores que les cuidan. “De poco sirve que se hagan pruebas a los residentes si el personal está infectado”, cuestiona Carlos Román, presidente del comité.
Los sindicatos celebran que por fin hayan comenzado estas pruebas en Ciudad Real (el lunes en uno de los dos centros Guadiana), pero las consideran “insuficientes” si no se incluye a los trabajadores, para detectar los casos de infectados asintomáticos, peligro potencial para los abuelos.
Si el personal no está testado el virus se sigue expandiendo
“Entendemos las dificultades y las prioridades, pero mientras no se hagan las pruebas a internos y plantilla el virus se seguirá extendiendo”, insiste Román, opinión que comparte el director de la residencia Gregorio Marañón, Miguel Ángel Mora.
La situación de personal en las cuatro residencias que dependen de la Consejería de Bienestar Social de la Junta, el centro Guadiana I, la residencia asistida Gregorio Marañón, la Ciudad de Matrimonios Ancianos (Ciudad Real) y las Pocitas del Prior (Puertollano), es que “no damos abasto”.
El personal no da abasto: el lunes hubo 14 bajas
Las contrataciones excepcionales en plena expansión de la pandemia no han mejorado la situación general de “desbordamiento”, reconoce Román. Hay mucha plantilla de baja, o bien con síntomas o porque pertenecen a grupos de riesgo que no pueden exponerse a un potencial contagio, lo que implica más carga de trabajo y estrés para quienes siguen al pie del cañón (sólo el lunes se produjeron catorce bajas en estos cuatro centros).
Faltan auxiliares de enfermería
“Las carencias las tenemos sobre todo en auxiliares de enfermería, el personal de contacto más directo, y ni siquiera se puede contratar a más porque no hay en las bolsas, el Sescam ha ido tirando de ellas, y el problema es grave. Estamos intentando que se convalide la contratación de personas con otra titulación, aptos para trabajar en centros privados pero no en nuestras residencias”.
Equipos de protección
Respecto a los equipos de protección subraya que sigue habiendo carencias que se suplen con las donaciones de colectivos solidarios. “El Sescam nos facilita mascarillas y guantes de vez en cuando, el resto, batas, pantallas, etc, lo suplimos con la solidaridad. Es mejor tener equipos de protección aunque no sean los homologados, que no tener nada”.
Fallecidos en las residencias públicas por el virus
Respecto al número de fallecidos, Román opina (recalca que es una opinión personal) que las cifras deben ser mayores que las que se han dado, porque no se han hecho pruebas. El dato de la residencia Gregorio Marañón es que han muerto 3 internos de coronavirus, entre 307 internos, “y las cifras que nos las han trasladado de forma verbal del primer trimestre del año, 28 muertos, no difieren de los del invierno pasado, o eso es lo que nos dicen” (está residencia acoge a asistidos y grandes asistidos).
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