“El trabajo de rastreo de contactos realizado por el alcalde y los sanitarios de Arroba de los Montes ha sido fundamental para poder controlar el brote”, afirma el farmacéutico del municipio de menos de 500 habitantes, Juanjo Peña, que considera que si no hubiera sido por la labor desarrollada por ellos es posible que el brote de Covid-19 hubiera sumado mucho más que los 28 positivos detectados hasta el momento.
El farmacéutico, que permanece en cuarentena al ser diagnosticado como positivo, ensalza el trabajo que ha desempeñado junto al médico, el enfermero y el alcalde del pueblo, y lamenta que desde los comunicados de la Consejería de Sanidad “casi se haya obviado” la labor que han desarrollado estas últimas semanas.
Recuerda que en el pueblo comenzó la sospecha de la posible presencia del virus en Arroba cuando miembros de una familia que pasaba unas vacaciones en el municipio acudieron con algunos síntomas a las Urgencias del Hospital de Ciudad Real, donde les realizaron las pruebas del covid-19 y resultaron positivos.
Esas personas habían hecho vida normal en el municipio, como acudir a la farmacia a por sus tratamientos, o las ya famosas comidas de amigos los días 17 y 18 entre cuyos asistentes se detectaron casos positivos.
En este sentido la Consejería de Sanidad confirmó en un informe que el brote fue importado de una familia que llegó de otra comunidad autónoma, y que los primeros síntomas se detectaron entre el 19 y el 24 de julio, registrándose la mayor parte de los casos como asintomáticos.
Ante este panorama, el alcalde y los sanitarios de la provincia iniciaron rápidamente un rastreo de todos los contactos de las comidas para iniciar una serie de pruebas PCR que permitiera un pronto diagnóstico para tomar las medidas pertinentes que favorecieran el control del brote, principalmente el confinamiento de los afectados y sospechosos.
En esta línea, el farmacéutico subraya que un episodio que aceleró esta búsqueda fue el que tuvo lugar en su farmacia, cuando una mujer que asistió a una de las cenas acudió allí para retirar un medicamento y vomitó. “No tenía ella conocimiento de padecer la enfermedad, se le hizo la prueba y dio positivo”, explica Juanjo Peña, que detalla que él no ha podido librarse del contagio durante estos días.
Relata Peña que su contagio le obligó a buscar un sustituto para no dejar sin farmacia al municipio. Afortunadamente encontró un compañero que le cubre mientras cumple con su cuarentena. En este sentido lamenta que Sanidad en su comunicado indicara que fue la Consejería la que facilitó la sustitución, “cuando fui yo el que tuve que hacer las gestiones para conseguirlo”.
El farmacéutico de Arroba vio confirmado su positivo el 30 de julio. Asintomático y en buen estado de salud, ahora tendrá que esperar hasta el próximo día 12 de agosto para someterse a una nueva prueba PCR. Si es negativo podrá tomar de nuevo los mandos de su farmacia, si no es así tendrá que esperar una semana hasta una nueva prueba que pudiera confirmar su negativo.
Destaca que el pueblo ya vive más tranquilo que los últimos días de julio, respetándose las medidas adoptadas, principalmente el permanecer en casa y salir sólo para lo imprescindible. Poco a poco se recupera la normalidad tras un periodo en el que el miedo por el covid-19 ha planeado por Arroba de los Montes.