L. R.
Ciudad Real
Para Alfredo Palmero, la palabra Arte es “casi sagrada y de enorme respeto”. Considera que el buen arte puede beber de muchas fuentes y cita, en este sentido, a Picasso: ‘Pinta lo que quieras pero con oficio’. Para Alfredo Palmero, “es muy importante en este mundo tan global que tiende a ser uniforme la existencia de universos personales. Y ahí es donde yo intento estar”, asegura un creador, nieto del Maestro Palmero, para quien en “el arte no hay progresos, hay propósitos”.
PREGUNTA.- ¿Por qué quisiste ser pintor?
RESPUESTA.- No se pueden razonar los motivos por los que quise ser pintor. Es un hecho que se impone a todo, que lo aplasta todo. Soy de los que piensan que el pintor nace, no se hace.
P.- Pintas mucho a las mujeres. ¿Es la mujer importante en tu vida?
R.- Sí, desde siempre he estado muy unido a mi madre y tengo una hija Única, también está mi esposa e incluso mi mayor colaboradora es mujer, mi hermana. Todas ellas están representadas simbólicamente en la serie meninas.
P. ¿Tienes alguna musa?
R.- No tengo una musa concreta, pero sí tengo una musa ideal: Es una mujer bella, fuerte y misteriosa, como casi todas las mujeres.
P.- ¿Hay algún pintor español contemporáneo que admires o te inspire?
R.- No estoy muy informado sobre los pintores españoles actuales. Mi influencia de pintores de vanguardia son, sobre todo, Picasso, Klee y el expresionismo americano.
P.- Empezaste a pintar al lado de tu abuelo ¿Cuándo comenzó a enseñarte?
R.- No recuerdo en realidad el momento en que comencé a pintar. Nací en una casa donde la pintura se fundía con la vida. Creo que debía tener 4 ó 5 años.
P.- ¿Era muy estricto?
R.- Mi abuelo tenía 68 ó 69 años cuando empezó a enseñarme y no era estricto. Le pesaba más la parte de abuelo que la de profesor o maestro de arte. Pero era una persona con un fuerte carácter y, a veces, destruía tu trabajo, pero siempre para aprender algo nuevo.
P.- Explicanos algo de esta experiencia.
R.- Recuerdo que me sentaban a su lado sólo para verlo pintar, sin hacer nada, sólo mirar. Y eso fue de gran provecho.
P.- ¿Cuándo supiste que serias pintor?
R.- Siempre supe que sería pintor. Pero la decisión definitiva fue cuando murió mi abuelo en 1991.
P.- Mucha gente te relaciona con Velázquez por tu serie de las Meninas. Así mismo, los colores y las formas tienen relación con la moda.
R.- En mis Meninas hay influencia de Velázquez, pero también de más cosas: La moda, nuestro tiempo y una idea que hay detrás de todo, la de vida en el sentido amplio, del individuo que se funde con su entorno, con la madre tierra. Por su puesto, es un homenaje a la mujer, con su belleza, fuerza y poder.
P.- ¿Qué técnica utilizas en la serie Meninas?
R.- Aunque también empleo collage o fotomontajes, la serie Meninas es pintura pura basada en un modelo real o no y en la imaginación.
P.- ¿Qué opinas del arte digital?
R.- El arte digital tiene influencia en la plástica de hoy y puede hacer que la gente pierda interés en la manera tradicional de pintar. Pero, paralelamente, hay un resurgir de pintores de raíz clásica. En arte siempre hay movimientos contradictorios que van creando su historia, la del arte.
P.- ¿Crees que la tecnología digital aportará buen arte?
R.- Sí pero dependerá al final de los buenos artistas, como en cada época. Las generaciones futuras filtrarán lo bueno que quedará y tendrá influencia, mientras que lo malo desaparecerá.