La alcazareña ‘Óptica de Antonio’ recibió este miércoles el primer premio del Concurso de Escaparates impulsado por la Cámara de Comercio y Fecir por su propuesta inspirada en uno de los ballets más famosos de la historia, ‘El Cascanueces’, con motivo del 125 aniversario de su estreno.
En un teatro del siglo XIX, con sus cortinajes, bambalinas, candilejas y telón de fondo, transformó su escaparate protagonizado por una niña que no puede dormir, sueña con viajes y baila junto a una torre de regalos. Juegos de luces cálidas y frías y el efecto de profundidad se emplearon para esta propuesta por parte de una óptica que busca apoyar en sus escaparates eventos relacionados con la literatura, cultura y arte, indicó su responsable, Antonio García, quien recogió el primer premio del Concurso de manos de los presidentes de la Cámara, Mariano León, y Fecir, Carlos Marín.
En la sede de la institución cameral, se procedió a la entrega de los galardones de este concurso que recibió este año iniciativas de 130 establecimientos procedentes de 18 poblaciones de la provincia. El segundo premio lo recogió el diseñador Arnelio Romero, de la tienda de ropa a medida para mujer ‘Rincón D’Sastre’, de Villarta de San Juan, por su escaparate ‘Piensa un deseo’, en el que diversas jaulas encierran los complementos anhelados por una maniquí vestida de rojo valentino en contraste con el frío e impoluto blanco presente en la escena y el fondo negro del conjunto.
Por su parte, Victoria Moreno, del Centro Óptico Ojos del Guadiana, de Villarrubia, recibió el tercer premio por su bosque de osos decorado con un producto local como las aceitunas pintadas a mano de rojo; y Carmen Colorado, de Puertollano, se alzó con el cuarto por su escaparate, tan armonioso como atractivo, de artículos de decoración y navideños en el que emerge la magia de estas fechas festivas; mientras que el punto de atención al cliente ‘Primer Energy-Iberdrola’, de Alcázar de San Juan, consiguió el quinto galardón gracias al bosque encantado elaborado por Mónica Martín, en el que entra un unicornio, donde cada elemento tiene su propia luz y que está iluminado por el brillo de hadas y luciérnagas que se encienden y apagan.