Margarita García
Ciudad Real
La Posada de los Portales, en sus plantas alta y baja, ha venido acogiendo una excelente e irrepetible exposición de obras realizadas en pequeño formato de los pintores, Ángel Pintado y Fermín García Sevilla; dos creadores que, a través de distintos caminos, han conseguido un gran prestigio en el “masificado” mundo del Arte.
En total se ha podido disfrutar de un centenar de obras de estos pintores locales que prepararon todo un espectáculo de belleza, luz y color, exclusivamente para esta muestra benéfica, en la que han donado la mitad de los beneficios obtenidos a Cáritas Interparroquial.
Recaudación
Según García Sevilla alrededor de 22.000 euros, fruto de la venta de unas 30 obras; verdaderas filigranas del arte, en las que, a pesar del pequeño formato, no han escatimado sus mejores temas y pinceladas maestras para construir una de las mejores exposiciones del año Cultural.
La sensibilidad, casi lírica, de Pintado y su lucha constante por encontrar nuevas combinaciones de luces y contrastes, han dejado patente la calidad artística de este creador de instantes, rincones, paisajes, bodegones o de una fiesta de Semana Santa grandiosa guardada al completo -plasmada- como en una caja mágica.
Y es lo que desprenden los cuadros de este pintor: unas texturas, colores y atmósferas que realmente hechizan a los amantes de la buena y cuidada pintura,
Al igual, y en muy buena armonía, las obras de García Sevilla, nos han dejado ver al pintor de siempre y a ese otro que se transforma en la evolución, logrando paisajes llenos de misterio, que invitan al deseo de entrar en esa Naturaleza sublime. Sus bodegones, como los de Pintado, aunque diferentes, han cautivado a un público menos expansivo, aunque no menos entendido en la materia.
Ambos pintores figurativos, tienden en muchos casos a un precioso impresionismo fantástico o a un expresionismo suave y equilibrado, que da fuerza y atracción a sus obras.
