Las profesiones artísticas no son fáciles y, de hecho, muchos pensarán que, dependiendo de cuál, es imposible desarrollarla lejos de las grandes ciudades. Sin embargo, a veces queda patente que no hay que elegir entre la calidad de vida de un pueblo, en plena comarca de Calatrava, y la excepcionalidad de una profesión poco habitual, ligada a los grandes estrenos, los multitudinarios festivales y las ‘alfombras rojas’. Pablo P. Garcia lo ha logrado. En Torralba de Calatrava tiene cuanto necesita: su familia, sus amigos y su estudio desde el que compone música para películas.
Pregunta: ¿Desde cuándo te dedicas a componer música para películas?
Respuesta: Mi camino profesional en el cine empezó allá por el año 2014. Ya componía anteriormente, y siempre me llamó la atención contar historias a través de la música. Así que, podemos decir que fue un paso natural en mi vida.
Mi primera oportunidad llegó de la mano del productor Rafa Linares, a quien conocí a través de un buen amigo, que tocaba en un grupo de música al que yo le hacía los arreglos. Todo empezó con la serie documental ‘La primavera Rosa’ y a partir de ahí no he parado de trabajar en una gran variedad de proyectos.
P- ¿Siempre has trabajado desde Torralba de Calatrava?
R.- No, yo soy un madrileño y he encontrado en el Campo de Calatrava mi refugio creativo. En Madrid empezó esta aventura músico-cinematográfica, pero no he notado ningún cambio ni en el volumen de trabajo ni en la manera de trabajar, más allá de que aquí se respira mucha más tranquilidad, algo que ayuda sin duda a mi manera de entender la creatividad.
P.- Eres torralbeño de adopción, pero ¿qué opinas de la cultura musical que hay en el municipio?
R.- Casualmente aterricé en Torralba a través de un amigo que es de aquí y que también es músico, por lo que conozco de primera mano la cultura musical del pueblo. He de decir que para ser un pueblo pequeño, hay bastante tradición musical, con una banda de música relativamente grande que tiene mucha actividad, aunque estos dos últimos años lógicamente se ha notado el parón artístico debido a las restricciones por el Covid-19. No obstante, como digo, hay tradición y pasión por la música, todo ello reforzado con una escuela de música magnífica, con instalaciones muy modernas y muy buen profesorado.
P.- ¿Cómo es el proceso? ¿Haces la música sobre la película ya grabada o compones sobre el guión?
R.- Yo trabajo de varias maneras. He hecho la música viendo las imágenes ya montadas, la he hecho sobre el guión antes de grabar la película o, incluso, he escrito música sobre las ideas que algún director me ha dicho que tenía en mente para escribir un guión. Cada una tiene sus ventajas y sus inconvenientes, pero todas ellas son válidas siempre que no olvidemos cuál es el fin de nuestro trabajo, ayudar a contar historias.
P.- Si echamos un vistazo a tu página web vemos que en tu carrera como compositor de música de cine ya tienes sobre tus hombros más de 30 proyectos, algunos premiados y muy bien valorados por la crítica. ¿Tienes alguna película de la que te sientas especialmente orgulloso?
R.- Es muy complicado elegir, porque cada proyecto en el que trabajo termina siendo especial. Algunos lo son desde el principio, como el caso del cortometraje ‘Four’, que supuso mi primer trabajo internacional en EEUU, y que es un corto mudo y en blanco y negro, así que la música es absolutamente protagonista.
P.- En la provincia de Ciudad Real hemos tenido y tenemos actores y directores de cine muy reconocidos y premiados como Pedro Almodóvar. ¿Te ves recogiendo un Goya a la mejor música original?
R.- La verdad es que recoger un premio, bien sea un Goya o bien cualquier otro, siempre hace ilusión. Es un reconocimiento a tu trabajo y esfuerzo, pero el mayor reconocimiento y la mayor recompensa a la que puedo optar como compositor es que mi música haga crecer los proyectos en los que trabajo y que me sigan llamando para trabajar. Eso significará que estoy haciendo las cosas bien.
P.- ¿Castilla-La Mancha te ofrece las herramientas para grabar la música que tú has escrito para una película?
R.- Muchas veces, cuando una comunidad autónoma financia una producción, o parte de ella, una de las cosas que hace es ‘poner su orquesta’ y los medios para grabar la música. En Castilla-La Mancha tenemos el hándicap de no contar con una orquesta profesional estable, lo que nos coloca en el triste lugar de ser una de las poquísimas comunidades autónomas que no cuenta con una, o varias orquestas profesionales. Tenemos teatros y auditorios de gran valor e importancia, me atrevería a decir que a nivel nacional, que carecen de una temporada de abono, lo que daría un empujón enorme a la vida cultural de nuestra región. Esto hace, a día de hoy, imposible hacer un largometraje cien por cien castellano-manchego.
P.- ¿Crees que Castilla-La Mancha da oportunidades formativas a una persona que elija, como tú, la profesión de compositor de música para cine?
R.- Creo que queda mucho camino por andar. En toda la región sólo tenemos un Centro Superior de Música donde se imparten enseñanzas de grado, el Conservatorio Superior de Música de Albacete y teniendo en cuenta que la composición sólo se puede estudiar en estos centros (no existe la especialidad de grado medio en composición), hay muy pocas oportunidades de poder estudiar aquí. A mi parecer, una Comunidad Autónoma del tamaño e importancia de la nuestra debería tener, al menos, uno o dos más. Esto deriva en que muchos castellano-manchegos se ven obligados a dejar la región para poder cursar estudios superiores y cumplir su sueño, vivir de la música.
