En el marco del proyecto del Conservatorio Marcos Redondo titulado ‘Las mujeres en la música’, sus profesores ofrecieron este jueves un Concierto Extraordinario en honor a Santa Cecilia con un repertorio protagonizado fundamentalmente por compositoras.
En los recitales, predominan los nombres masculinos en la composición y suele echarse en falta la presencia femenina ya que, en muchísimos de los casos, las autoras tuvieron numerosos problemas para “sacar adelante su trabajo y, sobre todo, para darle visibilidad”, comentó el coordinador de actividades del Conservatorio, Hernán Milla, que expresó su satisfacción por el programa de un concierto para “descubrir nuevas composiciones y dar voz a una música maravillosa que por unas razones u otras” ha quedado más o menos oculta.
El recital de Santa Cecilia comenzó con la interpretación a cargo de Rosa Sanz a la flauta de la obra ‘Kokopeli’, inspirada en la música nativa americana, de la recientemente fallecida flautista y compositora estadounidense Katherine Hoover.
Dos piezas, ‘Hai Luli’ y ‘Havanaise’, de la cantante de ópera y compositora francesa de origen español, Pauline Viardot, fueron las siguientes propuestas del recital a cargo de la mezzo soprano Susana Ferrero y el pianista Miguel Ángel Gómez, que también deleitaron en el Auditorio Manuel de Falla con ‘Cançâo Bárbara’ de la autora brasileña Najla Jabôr.
Por su parte, el flautista Carlos Cano y el propio Milla al piano tocaron ‘Piece’ y ‘Scherzo’ de la compositora parisina, cuya obra se sitúa entre el romanticismo y el impresionismo, Mel Bonis, pianista autodidacta que tuvo que luchar contra la oposición de su familia a que se dedicara a la música y hasta que siguiera los deseos de su corazón ya que la obligaron a casarse con un industrial mucho más mayor que ella. No fue hasta que se reencontró con su ‘amor imposible’, un brillante cantante, cuando volvió a componer y desarrollar su carrera artística.
La feminidad, frescura y vigor de la también autora francesa Germaine Tailleferre, única mujer del famoso Grupo de los Seis, de principios del siglo XX, y que no encontró apoyos en sus maridos para el desarrollo de su labor compositiva, también impregnaron el Concierto de Santa Cecilia con la interpretación de ‘Serenata en La menor’ a cargo de Rosa Sanz a la flauta, Bernardo Moreno al clarinete, Emilio Cejudo al oboe, Lorena López al fagot y Sergio Ruiz al piano.
Así mismo, el recital permitió disfrutar de dos obras de compositores masculinos. La primera fue ‘Chambres’, pieza dedicada al mundo de la infancia del también profesor del Conservatorio, Antonio Fernández Reymonde; y la segunda, ‘Fantasía de concierto’, de Eduardo Boccalari, a cargo de Pedro Delegido a la tuba y Sergio Ruiz al piano.
