El alcalde de Pozuelo de Calatrava, Julián Triguero Calle y el escultor José Antonio Castro Torres firmaron en la tarde de este lunes el contrato para la construcción del monumento en honor al insigne pozueleño y humanista religioso, Calixto Hornero Calatrava.
El monumento que se realizará tratará de exaltar, sobre todo, los valores pedagógicos de este ilustre hijo de Pozuelo de Calatrava, y estará compuesto por dos figuras, una de un sacerdote escolapio, ya mayor, recordando a Calixto Hornero, representándolo como pedagogo y un niño fundido con él, como símbolo de la comunión en la que han de estar el alumno y el maestro. Éste, con el brazo levantado al cielo, le muestra en su mano una brújula, indicándole el buen camino que el niño parece dispuesto a alcanzar.
“Es una composición muy dinámica, en diagonal con movimiento en arco, que finaliza en el punto de más tensión compositiva, situada en el cuadrante superior derecho centrado en la brújula.”, explicó José Antonio Castro. “El conjunto escultórico estará modelado a tamaño mayor del real, en concreto medirá hasta la cabeza 1,90 metros., más la altura del brazo levantado, e irá realizada en bronce -cusimn- patinada y montada sobre pedestal de granito abujardado de 1,50 metros de altura”.
La escultura que tendrá un coste de 35.278 euros, está financiada en el 80 por ciento por la Asociación para el Desarrollo del Campo de Calatrava, proyecto que fue aprobado por su Junta Directiva en la reunión del pasado mes de junio, y el resto será sufragado por el Consistorio pozueleño.
Dicho proyecto fue iniciado por la Concejalía de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Pozuelo de Calatrava hace año y medio, y, tras las gestiones y tramitaciones necesarias para conseguir su financiación, por fin verá la luz en los próximos meses.
Calixto Hornero Calatrava
El humanista y exegeta Calixto Hornero Calatrava nació el 14 de octubre de 1742 en Pozuelo de Calatrava, hijo de Raimundo Hornero y de Francisca Calatrava, fue uno de los escolapios más ilustres por su ingenio, sabiduría y piedad. Enseñó humanidades en San Fernando. Vistió el hábito escolapio en el año 1757, profesando en 1759. Gran orador, retórico, poeta, muy versado en griego, bastante en hebreo y mucho más en latín. Pedagogo, consultor provincial, procurador de la Provincia, rector del colegio de San Fernando, en 1789 fue elevado al Provincialato, cargo en que le confirmó el visitador Froilán Cabanas. Ayudó en la gran empresa de la Biblia del P. Felipe Scío. Tenía, además, preparada una versión propia del Nuevo Testamento, cuando le sorprendió la muerte en Madrid el 7 de febrero de 1797.
José Antonio Castro Torres
El escultor José Antonio Castro Torres nació en 1943 en la localidad ciudarrealeña de Moral de Calatrava, comenzando a sus diecisiete años a impartir clases de dibujo en el Seminario Diocesano de Ciudad Real.
Ordenado sacerdote, pasó a formar parte de la Comisión de Arte Sacro del Obispado de Ciudad Real, realizando gran cantidad de proyectos de reforma, adaptación y nueva planta de templos y capillas.
Graduado en Decoración en la Escuela de Artes Aplicadas de Valencia y licenciado en Bellas Artes por la Facultad de San Fernando de Madrid, desde 1978 impartió clases como profesor de Decoración en la Escuela de Artes de Ciudad Real hasta el 2005, año en el que se jubiló.
Ha realizado infinidad de exposiciones y participado en concursos de pintura y diseño, así como ha ejercido en varias ocasiones como jurado.
