Juventudes Musicales de Ciudad Real, con tres meses de andadura en esta provincia, ha conseguido dar a conocerse en las dos ciudades más importantes, Ciudad Real y Puertollano, con dos conciertos de alto nivel.
En un hora y día poco habitual -domingo a las 12 de la mañana- se ha celebrado el concierto promovido por esta Asociación, en la Casa de Baños de Puertollano. El histórico edificio que en su día cobijó los inicios del Conservatorio de Puertollano “Pablo Sorozábal” fue este domingo el lugar desde donde un grupo de jóvenes músicos han convertido en música sus conocimientos.
Ocho violines, dos violas, dos violonchelos y un contrabajo han formado la orquesta “Camerata Arco Arriba”, todos ellos músicos antiguos alumnos del Conservatorio de Puertollano. A ello se le suma el violín del profesor que ahora los aglutina y dirige: Enrique Santacecilia, también de este Conservatorio.
Música clásica en un programa que combinaba la técnica y dificultad de los instrumentos de cuerda frotada con la sencillez de temas asequibles para todos los “oídos”. Programa magníficamente ejecutado que agradó notablemente al público que asistió a este acto, quienes con sus aplausos insistentes consiguieron un “regalo” -bis-.
Alrededor de cien personas se dieron cita en este acto en el que además de la asociación y los músicos y Conservatorio cabe destacar la colaboración total del Ayuntamiento poniendo a disposición el local en condiciones perfectas de uso.
Juventudes Musicales de Ciudad Real pretende repetir y acudir a más sitios de la provincia, para así formar a los jóvenes músicos a la vez que se acerca la música clásica al común de los mortales. Actividades como esta elevan el nivel cultural de la ciudad que los promueve. Puertollano ha demostrado que tiene capacidad y recursos, sobre todo humanos, para dar vida a eventos como este.
