La acordeonista Olga Morral hizo las delicias del público que anoche acudió a la inauguración de los ‘Los Lunes del Arco’, aunque que se tuvo que desplazar del espacio ubicado al aire libre en los Jardines de El Torreón hasta el antiguo casino debido a la aparición de la lluvia.
Morral, que hace unos meses ya actuó en Ciudad Real, mostró su sensibilidad con un instrumento “todavía desconocido” en la interpretación de clásicos, y dio una lección de maestría de un instrumento “que es muy versátil” con la particular y cuidada ejecución de conocidas obras del Barroco, el Clasicismo y de la música contemporánea.

En concreto, completó un programa de diferentes estilos, como la barroca Suite inglesa, con varias partes, de Juan Sebastián Bach; las clasicistas Andante en Fa Mayor, de Mozart, y Sonata en Re Mayor, de Joseph Haydn, además del Ave María del compositor argentino de tangos Astor Piazzolla y la obra para acordeón ‘Trama concéntrica’, escrita por el músico catalán Jaime Padrós.
Fue un programa que Morral seleccionó “para mostrar la versatilidad de un instrumento todavía desconocido”, en su caso con una singular personalidad en la interpretación que cautivó al público que ya la conocía, tras actuar en la capital en 2021 dentro de la gira organizada por la Sociedad de Artistas Intérpretes o Ejecutantes (AIE).
Morral quiso agradecer, minutos antes de que el concejal de Cultura en funciones, Nacho Sánchez, anunciara el traslado de la actuación bajo cubierto, las oportunidades que le ha dado el Consistorio capitalino, y que le están aportando “experiencia” y “aprendizaje” a su bagaje artístico.
Reconoció, del mismo modo, la presencia de acordeonistas entre el público, al ser, a su juicio, “gratificante tocar para gente que también toca este instrumento”.

Morral es conocida por las adaptaciones para acordeón que hace de obras de diferentes épocas y tendencias, desde el siglo XVI al siglo XXI. Se trata de un instrumento de cierta dimensión caracterizado por el fuelle central, cuyo manejo requiere de una gran habilidad y destreza.
Son cualidades que no le faltan a la acordeonista de origen catalán, formada en el Centro Superior de Música del País Vasco, en otro prestigioso centro artístico alemán y bajo la docencia de reputados profesores. En cada concierto, aborda su ejecución con un estilo delicado y característico, gracias, según la crítica, a “un trabajo preciso, tenaz y perseverante”.
Morral no ha podido mostrar su arte al aire libre en Ciudad Real, a la espera de otras visitas a la ciudad.