Los asiduos a La Fábrica del barrio de La Hormiga pudieron participar este sábado como protagonistas de retratos en el duelo que libraron dos grandes autores de la ciudad y ‘colegas’, tanto por profesión como por amistad. Manuel Plaza y Paco Carrión realizaron retratos rápidos a quienes se prestaron a participar en este ‘reto’ que posteriormente se expusieron en las paredes de La Fábrica, mientras que el resto de asistentes contemplaban en directo su habilidad pictórica o recorrían el ya noveno mercadillo de productos agroecológicos, artesanos y locales, el cual se celebra el segundo sábado de cada mes.
La Fábrica, situada en la calle San Urbano 25, ha exhibido durante un mes una muestra con obras tanto de Plaza -diecisiete- como de Carrión -trece-, quienes, amigos “desde los años 80” y licenciados ambos en Bellas Artes, han retomado con esta propuesta la iniciativa de exponer juntos, algo que hicieron en el 98 en el Elisa Cendrero y en el 99 en el Patio de Fúcares de Almagro.
La mañana en La Fábrica contó con la música del Colectivo UFOria y en el mercadillo se pudieron adquirir ‘Huevos camperos Montes de Toledo’, procedentes de gallinas en libertad y con yemas de intenso color y muchos de dos yemas, apreció Manuel Úbeda, de Villarrubia de los Ojos. También la Asociación Agroecológica ‘Manchecos’, que cultiva sin agrotóxicos en la Finca Galiana y Alcolea, llevó los productos finales de la huerta de verano y los primeros de la de otoño y se pudieron encontrar cebollas, ajos, melones, pimientos, tomates, acelgas, coles, calabazas y almendras.
Por primera vez, participó en este mercadillo la almagreña Gema Martín con su stand de plantas agroecológicas, aromáticas y medicinales, en la que exhibió aceites e hidrolatos de salvia, romero, jara, ciprés, melisa y tomillo, plantas que cultiva, recoge y transforma en hidrolato por destilación. Además, ‘Sapukula’, de Villarrubia de los Ojos, mostró su cosmética natural con jabones naturales, champús y oleatos, obtenidos artesanalmente con plantas del entorno, cercanas y sin tóxicos como romero, salvia, ortiga, tomillo, caléndula y lavanda.
También, en sintonía con su apuesta por propiciar el comercio de cercanía, pese a que no le faltan clientes en mercados tan dispares como los europeos, americanos e incluso australianos, Finca Fuentillezjos asistió con tres de sus quesos ecológicos: el de romero y miel -situado entre los 66 mejores del mundo- y los manchegos semicurado y curado. 70.000 kilos de queso al año vende sólo con la leche de ovejas propias Finca Fuentillezjos, con una producción muy demandada en grandes ciudades como Madrid y sobre todo Barcelona y que en el 90 por ciento va a otros países, siendo Alemania y Dinamarca sus principales mercados.
Así mismo, en el mercadillo se instalaron dos stands ‘retro’, uno con artículos de los años noventa en adelante -en el que se pudieron encontrar libros y cds de primera y segunda mano, así como motos y coches en miniatura y otras figuras de modelismo- y otro de los años 60 hasta finales de los ochenta, con una amplia variedad de artículos -desde cómics a yoyós- que se podían adquirir en aquella época en los quioscos.
Con unas migas culminó el vermú electrónico de La Fábrica, que acogerá el próximo sábado un evento relacionado con la protección animal en el que participarán, entre otros colectivos e iniciativas, Ciudad Real Cats, Gatómicas y el Santuario La Frontera.