El Museo del Quijote albergó este jueves el encuentro, programado con motivo de la reciente celebración del Día de la Mujer con el apoyo de la Concejalía de Educación e Igualdad y en el que recitaron poesía más de una quincena de escritoras.
La madrileña “afincada” en Ciudad Real, Elena Martín Dols, fue la primera en intervenir, trazó un breve recorrido por la historia del Día de la Mujer y leyó su poema ‘Soy mujer ¿y qué? ‘, para dar testigo a la daimieleña, residente en Poblete, Susana Martín de la Sierra, que recitó ‘Madre’; así como a Mari Cruces de la Flor, también de Daimiel, que obsequió a los presentes con el rap sobre igualdad ‘Pares’.

La alpujarreña y manchega de adopción Leonor Rodríguez Almendros animó a ‘Redimid a la mujer de la escoba, la prisa y la rutina’ y Antonia Piqueras, de Villamanrique, reflexionó con ‘Frente a frente’ sobre el paso del tiempo y cómo una mujer, consciente de lo que ha estado haciendo, de toda su labor, se da cuenta de que casi no se reconoce porque su entorno ha cambiado, sus hijos son mayores, y empieza a vivir de otra manera. También Piqueras recitó ‘Mujer, un desafío al viento’, “reivindicando todo lo que en sí es una mujer, a todos los niveles, toda su valía y esencia”.
Por su parte, la asturiana Sara Prida Vega presentó ‘Creo que’, sobre una mujer que descubre en el bosque una cabaña y acaba desvelando que ella es la bruja que habita ahí; la solanera Tomi Peinado imaginó las andanzas de Aldonza Lorenzo, musa del ingenioso hidalgo que describió Cervantes y, más tarde, ya como actriz de una compañía italiana de la comedia del arte, de Shakespeare; y la valdepeñera María Rosales compartió los sonetos ‘Por asalto’ y ‘Bruma’.

Las almagreñas Montse Rayo, con poemas como ‘Qué te diría yo cuando te vayas’ y ‘Desarmando’, y Concepción Téllez, con la obra ‘América rebelde’, también participaron en el encuentro, en el que se escuchó, a su vez, la voz de dos jóvenes ciudarrealeñas como Silvia Bravo, de 25 años, que leyó obras de dos artistas como Emily Dickinson y Anne Sexton que “le han marcado en lo personal y académico”; y Belén Romero, ‘Lluvia de Romero’, de 32 años, cuya poesía de “verdad directa, sin edulcorar” conectó de inmediato con el público al exponer sus reflexiones sobre la soledad en la maternidad.
Son “nuevas voces, nuevas poetas que se han atrevido a ser cómplices” en este acto de la mujer que da voz donde antes había silencio, apuntó Teresa Sánchez, presidenta del Grupo Guadiana, que aportó el poema ‘Perderse para reencontrarse’ y entregó, junto a Fran Barba, diplomas y flores a las participantes.

Mar Arreaza fue otra de las voces convocadas en el recital al que asistió la concejal de Educación e Igualdad, María José Escobedo, que recitó un poema propio, el que escribió cuando sufrió una grave enfermedad de la que felizmente se recuperó, describiendo todas las fases: tristeza, nostalgia, soledad, temor, rencor, dolor y final, con la conclusión de que “todo cambió, todo es diferente, sólo existe el presente”.
Marta González, de la Escuela de Música Moderna y del grupo de Coros y Danzas Mortara de Piedrabuena, ambientó el acto con versiones de Rozalén y Annie Lennox.