Los museos cobran vida, se vuelven más atractivos y cumplen mejor las funciones para las que fueron creados de conservación y difusión del patrimonio con la incorporación de las nuevas tecnologías, expuso Víctor Manuel López-Menchero, director científico en España de Global Digital Heritage, que resaltó que la clave y el reto radican en “cómo emplear la tecnología de la mejor manera posible”.
A juicio de López-Menchero, que impartió en el antiguo Convento de la Merced la conferencia ‘Del museo tradicional al digital: Un destino inexorable’, se ha pasado de considerar casi como una afrenta o una aberración la incorporación de la tecnología en los espacios museísticos al deseo de instalarla de forma masiva en todos los museos aunque sea sin una finalidad específica, por lo que estimó que se debe buscar el equilibrio y utilizarla con objetivos y planificación para que favorezcan su contribución a la democratización cultural y el desarrollo socioeconómico de los lugares donde se enmarcan los museos, además de ayudar a conservar el patrimonio.
Las nuevas tecnologías son “un revulsivo en la difusión del patrimonio cultural”, destacó el responsable de Global Digital Heritage, “entidad sin ánimo de lucro de Estados Unidos” que está trabajando en proyectos en esa línea de democratización cultural relacionados fundamentalmente con la digitalización del patrimonio y la posibilidad de replicar en tres dimensiones tanto monumentos como objetos. Estas réplicas en 3D pueden servir para restauración virtual que luego puede convertirse en una real y en el ámbito de la difusión y comunicación posibilitar visitas y reconstrucciones virtuales, además de generar maquetas impresas a través de la emergente tecnología de las impresoras 3D.
López-Menchero se refirió también a las aplicaciones para móvil que “han entrado con fuerza” en los museos, aunque consideró que aún queda camino en perfilar mejor los objetivos para los que se usan estas herramientas y expuso que lo que estima que perdurará es “lo que a veces es menos visible que es toda la parte de la contribución que pueden hacer las nuevas tecnologías en la misión del museo como centro de investigación y preservación de patrimonio” con el concienzudo trabajo que se está realizando de conservación digital e incluso para restauración.
Dos caras de una misma moneda
En cuanto a la difusión y comunicación, una de las vías más interesantes es la de las visitas virtuales que permiten moverse de foto esférica en foto esférica en el recorrido de un espacio museístico o monumento, complementado con la incorporación de modelos tridimensionales de las piezas que, por ejemplo, están en las vitrinas de los museos que suelen sólo poder verse por una cara y la incorporación en 3D de los monumentos o yacimientos arqueológicos de donde fueron extraídos esos objetos.
De esta forma, se vuelve a “unir lo que se ha separado, el monumento del objeto. Todo forma parte del registro arqueológico y, sin embargo, el monumento se queda donde estaba y el objeto se va a un museo. Las nuevas tecnologías nos permiten conectar esos dos mundos que no se pueden explicar el uno sin el otro y son dos caras de una misma moneda”.
Con las nuevas tecnologías se consigue superar fronteras espaciales, físicas e intelectuales, ampliando el conocimiento, siendo el objetivo planificar buenas herramientas y estrategias de comunicación que faciliten que el espectador no sólo vea el objeto y el monumento sino que lo entienda. En este propósito, juega un papel muy importante la reconstrucción virtual ya que, por ejemplo, si presencio cómo era en el siglo XII el castillo de Alarcos se pueden comprender mejor los restos actuales o si se reconstruye la necrópolis donde estaba una urna cineraria íbera y el ritual funerario se ayudara a entender mejor esta valiosa pieza.
En su intervención, enmarcada en las actividades del Día Internacional de los Museos, López Menchero habló de la aplicación de las nuevas tecnologías en distintos museos y monumentos del mundo y, como ejemplo, indicó que el Museo Arqueológico Nacional antes de su cierre en los primeros años del siglo XXI recibía en torno a 250.000 visitantes anuales y, tras su renovación y con la introducción de nuevas tecnologías en distintos ámbitos como proyecciones, reconstrucciones virtuales y pantallas interactivas, recibe actualmente un millón de visitantes al año. Se ha cuadriplicado el número de visitantes, lo cual no es debido en su totalidad a las nuevas tecnologías pero éstas han contribuido, apreció.