Una de las mejores cosas de la profesión de periodista es poder conocer íntimamente a personas que sorprenden y merecen la pena. Así ha ocurrido esta mañana, hemos tenido la suerte de entrevistar a María Jiménez que ha obtenido uno de los premios del fondo de adquisición “Antonio López García” del LI Concurso Exposición de Pintura y Dibujo “Ciudad de Tomelloso” de la Fiesta de las Letras con “Niña en la playa”.
María Jiménez Martínez es de Tomelloso y comenzó a pintar en la madurez. La artista tiene poco más de 70 años y un dibujo suyo también ha sido seleccionado en el certamen. María es humilde, cercana y habla con sosiego. Tiene una voz dulce y no puede disimular su alegría por el premio que recibirá en 30 de agosto. Es de esas personas con las que se te pasa el tiempo volando.
—¿Qué ha supuesto para usted recibir un premio en el Concurso Exposición de Pintura y Dibujo de Tomelloso?
—Fue una gran alegría. He sido seleccionada en varias ocasiones pero el Primer Premio es algo muy importante. Cuando me llamaron para comunicarme que había obtenido el galardón me puse a llorar de la emoción. Y más que por mí porque la acuarela haya sido valorada, hasta ahora han sido el óleo y el acrílico las técnicas que se han llevado el gato al agua. Estaba como postergada y este año la acuarela va a ser uno más de los premios. Eso ha sido lo que más emoción me ha causado.
—Descríbanos “Niña en la playa.
—La “Niña en la playa”, el cuadro que ha sido premiado, es una pequeña trasformación de un dibujo mío que también ha sido seleccionado en el certamen. Es una niña a la que su madre hizo una fotografía y con mi pintura he querido llevarla a la playa, jugando y paseando con un gato.
—¿Cuánto tiempo lleva pintando?
—Empecé en la Universidad Popular hace 22 años, de casualidad. Hice el curso de Jardín de Infancia en la UP y vi que ofrecían cursos de pintura, me gustó y al año siguiente me apunté. No he salido de Universidad Popular pero ahora llevo unos años que no asisto a las clases. Mis conocimientos pictóricos vienen de ahí.
—Además, usted forma parte del Grupo Alborada, ¿no es así?
—Somos un grupo de siete mujeres pintoras, todas de la Universidad Popular. La idea surgió Dori Olmedo, me propusieron formar parte del colectivo y ahí estamos. Además de Dori y yo, también forman parte de Alborada, Rosa Burillo, Angelines Monreal, Rosi Chinchilla, Paqui Parra y Conchi Lomas y ya hemos hecho varias exposiciones.
—¿Qué pintores le gustan más, cuales le han servido de inspiración, ya sean locales o de otros lugares?
—Locales me gustan mucho Ezequiel Cano —con quien empecé a pintar— y Ángel Pintado. Me gusta mucho visitar las exposiciones, acudo a todas las que puedo. Hubo una en el Museo Infanta Elena de Alfredo Castañeda, un pintor mexicano, que me causó mucha sensación porque pintaba sobre él. Cuando te pones a pintar no puedes hacer copias, tienes que ser tú misma, sacar un personaje… Y qué mejor personaje que yo. Y ahí es donde estoy, porque la niña de la playa era yo.
—¿Se fija en acuarelistas famosos?
—Sí, en maestros como Turner del que he hecho copias. Estoy muy metida en las webs de los museos.
—¿Qué le ha aportado la pintura a su persona, María?
—Personalmente me hace mucho porque me lleva a otro mundo. Estás pendiente de tus dos horas —me he puesto ese horario— y tienes la mente ocupada sin pensar en otra cosa. La pintura y leer me hacen mucho, compañía sobre todo.
—Tomelloso es un semillero de artistas, ¿cómo valora esa circunstancia?
—Hay mucha gente con arte en Tomelloso… y muchos muy buenos. Hay mucho talento escondido y gente que vale mucho, tanto mujeres como hombres.
—¿El hecho de ser mujer le ha perjudicado?
—Para nada. Lo que pasa es que esto me ha pillado ya muy mayor.
—¿Se ha presentado en más ocasiones al Concurso de Dibujo y Pintura “Ciudad de Tomelloso?
—Sí, alguna más. Recuerdo que el primer año que participé presenté unas botas y me seleccionaron, algo que no esperaba. A partir de ahí me he ido presentado, pero sin regularidad, unos años sí, otros fallaba… Me han seleccionado seis u ocho veces, por ejemplo el año pasado dos obras.
—Y ahora culmina con el Primer Premio.
—Me ha hecho mucha ilusión, insisto.
—Defina su estilo, María, y cuéntenos que temas escoge.
—Suelo pintar motivos que tengo en casa, principalmente fotografías; me gustan mucho las fotos antiguas. Las reproduzco a lápiz y carboncillo; también, como es el caso de la obra premiada, era una foto en blanco y negro que he pasado a color.
—La Fiesta de las Letras en una seña de identidad de Tomelloso.
—Es algo muy importante, para mí y para la ciudad. Llevamos setenta años, empezó con la literatura y continuó con la pintura, el dibujo y la fotografía. Quiero dar las gracias a quien pensó en estos certámenes y, también, a la Universidad Popular.
—Ha sido premiada con un jurado encabezado por Antonio López, nada menos…
—Es un completo honor, me emociona pensar que a Antonio López, uno de los mejores del mundo, Andrés Moya o Alfonso de la Torre les gusta mi pintura y la hayan valorado. Eso es muy grande.
—¿Está preparando algo nuevo?
—Ayer empecé. Quiero hacer algo para presentarlo al Certamen Virgen de las Viñas… Pero no sé, hasta que no está la obra terminada… La idea creo que es buena pero no sé como va a salir.