Se puede pensar que escribir es algo árido y muy aburrido, cuando, en realidad, puede ser “muy divertido” ya que “puedes inventar las cosas que van a ocurrir”, crear algo que no es exactamente real y a la gente le gusta y con ello ayudar a que los demás se evadan de sus problemas y rutinas, asegura Miguel Ángel González, que este martes, a las 11.45 horas, protagonizará un encuentro literario con alumnos del IES Campo de Calatrava de Miguelturra.
En este encuentro, impulsado por el Ministerio de Educación para que los chavales que habitualmente leen autores clásicos también tengan un contacto directo con escritores contemporáneos, González les recomendará, más que lecturas, a que “cuenten sus historias” y se animen a escribir. Con alumnos de 12 a 16 años suele reunirse en estos encuentros, edades que estima “idóneas” para animarles a “seguir jugando a la ficción” y a que no pierdan esa capacidad creativa.
Con el paso de los años, “todos nos cargamos de responsabilidades” como con la familia, el trabajo o comprar una casa, y puede ocurrir que se pierda la importancia de “jugar a inventar, a hacer ficción, que para mí es fundamental”, expone González, que resalta el valor de este esfuerzo ya que con una buena película o un buen libro “somos capaces de evadirnos de un mal día”. De esta forma, “inventando un mundo que no existe pero que funciona igual de bien”, se ayuda también a la gente a olvidarse de sus problemas y rutinas.
Todo ello no significa que haya que realizarlo a nivel profesional, sino como afición, como el que canta o juega al fútbol para entretenerse y divertirse.
“Contar historias” es algo parecido, opina González, que resalta, como profesor de talleres de escritura, que, cuando sus alumnos consiguen crear sus relatos, poemas o piezas de teatro, “el placer que produce” ese trabajo es “muy satisfactorio”, sin estar relacionado con ganar dinero o dedicarse a ello profesionalmente.
Ganador del Premio Café Gijón en 2015 con la novela ‘Todos los miedos’ y galardonado con el 2º Premio Fray Luis de León de Teatro por ‘Aguantar la respiración’, González ha recibido recientemente el Max Aub de Teatro por ‘Modo avión’, obra que publicará Ñaque en abril y en la que se narra un viaje en sentido inverso, desde que el protagonista toma el avión de vuelta hasta que coge el de ida. De adelante hacia atrás, cuenta la historia de una infidelidad de un hombre que achaca acudir a una reunión de trabajo cuando en realidad va a reunirse con su amante.
González, cuya último libro publicado es ‘Cariño’, hablará con los alumnos del IES miguelturreño de ‘Aguantar la respiración’, obra que los estudiantes han leído y que gira en torno a un joven mexicano que de forma “pseudoaccidental” mata a un niño en EEUU y es condenado a pena de muerte. Un periodista español acude a entrevistarle y en la obra, en la que se deja un final abierto, se incide en reflexionar no sólo sobre la pena de muerte, sino también sobre las segundas oportunidades, las decisiones que tomamos, el precio a pagar por errores y aciertos, y las consecuencias de las acciones que realizamos.
