El Santuario de Nuestra Señora de Alarcos fue construido entre los siglos XIII y XIV, en estilo gótico y planta basilical. Sobre la puerta de este Bien de interés Cultural desde 1990, se abre un gran rosetón de tracería. Evidentemente, está constituido por tres naves y planta de cruz latina, concebido con simbología católica al representar el número “3” la Santísima Trinidad. Las naves están separadas por diez pilares octogonales de piedra caliza, que soportan ocho arcos apuntados, conservando la capilla absidal su carácter netamente románico.
Especialmente hermosa es la fachada principal, orientada hacia el suroeste, en la que destaca su gran rosetón de tracería. Rehundido dentro de un marco cuadrado, está formado por diecinueve lóbulos tallados en piedra, y su diseño fue copiado posteriormente para el rosetón de la Catedral de Ciudad Real. La fachada sureste, tiene un porche sustentado por ocho columnas de piedra, que continua con la techumbre de la iglesia, de artesonado simple y cubierta de teja, aunque originalmente era de traza mudéjar con alfarjes pintados. Además de esta puerta, entrada habitual y noble al Santuario, que se abre en una gran explanada lugar de diversas celebraciones, el Santuario también está abierto al noreste por la puerta que mira al río Guadiana.
El grupo Musicantes
El grupo “Musicantes” nace en 2012 en Madrid por iniciativa de Jaime de Lamo, que realiza una importante labor de captación de músicos especializados en la música antigua. Desde entonces no ha parado de participar en conciertos, habiendo pasado también por Alarcos en el año 2013, “porque cuando nos llaman una vez, solemos repetir”, confiesa orgulloso el director musical.
Se compone de cuatro instrumentistas muy profesionalizados, que dominan una veintena de instrumentos, y que se agrupan en cuatro áreas importantes en la configuración del ensemble: la parcela del “viento”, comandada por Xuxo Ordóñez; la de “cuerda frotada”, responsabilidad de Milena Fuentes; la “percusión”, bajo la maestría del sudanés Wafir Shaikheldin (ya familiar por estas tierras, puesto que también en el concierto del día 20 formaba parte de Axivil Trío). Y, finalmente la parcela de “cuerda pulsada” medieval, bajo la ejecución de Jaime de Lamo.
Pero en la cuerda frotada distinguimos dos tipos, la frotada con arco, de Milena Fuentes, y un híbrido entre laúd y zanfona, que se llama viola de rueda, sinfonía o zanfona, de Jaime. Todos ellos son instrumentos reproducidos de las más de 1500 miniaturas de las Cantigas de Alfonso X el Sabio, “Que nos revelan una información muy importante sobre instrumentos, costumbres y vestuario de la época del rey sabio”.
El concierto de Alarcos
Con todos estos mimbres, “Ensamble Musicantes” urdieron un bien estructurado concierto, con repertorio de los siglos XII, XIII y XIV de “monodia medieval”, música basada en una sola melodía, si bien anoche se interpretó también una pieza polifónica “Ecco la primavera”, hermosa composición de Francesco Landini. Que fuera compositor, organista, cantante, poeta, constructor de instrumentos, astrólogo italiano, y maestro de organetto u órgano portátil de la catedral de Florencia (s. XIV).
Entre la números musicales, Cantigas de Amigo (Martin Códax) y Cantigas (de Loor y de Milagro) de Santa María (Alfonso X), Música andalusí del s. XIII, piezas de trovadores franceses como Guillaume de Machaut, s. XIV (Douce dame Jolie), y otras de origen italiano como el Saltarello o la Danza amorososa y troto.
La mayoría del repertorio fue igual de delicadamente interpretado por una cantante que, excepcionalmente, pudimos escuchar en este Ensemble Musicantes: Pilar Dieste. Este añadido artístico de la voz de Pilar, vino a colmar las expectativas de los habituales visitantes de este tipo de conciertos. Musicantes vino de Madrid, y a Madrid volvió para continuar con sus conciertos, después de haber dejado un excelente sabor de boca en el Santuario de Alarcos.
