En el segundo concierto de este XIV Festival de Alarcos, grandes interpretaciones procedentes de las tres culturas, cristiana, judía y musulmana. Bajo la dirección de Felipe Sánchez Mascuñano, nuestro vihuelista de lujo, que ha estado en Ciudad Real casi ininterrumpidamente desde el inicio de estos conciertos. El espectáculo, muy familiar a los espectadores, se compuso por canciones de trovadores, tradicionales sefardíes, romances, Llibre Vermell, Cancionero de Palacio y Cancionero Andalusí.
El nombre del grupo y de este programa, deriva del de Juceff Axivil, judío de Borja (Zaragoza), que en 1352 fue contratado para acompañar al Infante Juan de Aragón en un viaje entre Huesca y Zaragoza. Su misión era tocar la vihuela de péñola, para entretener la jornada del pequeño príncipe. Y así consta en el Archivo de la Corona de Aragón, siendo la primera referencia histórica a una vihuelista con nombre y apellido.
La música que interpretaría Juceff en aquel viaje con su vihuela de péñola (la pluma con la que se tañían las cuerdas), sería bastante parecida al programa que anoche se presentó en Alarcos. Canciones cristianas propias de la corte, canciones judías de su propia tradición, y algunas piezas moras que se mantenían vivas en los pueblos genuinamente mudéjares, que crecían en el trayecto entre Huesca y Zaragoza. Por lo tanto, se trata de un homenaje a las tres culturas existentes en la España de la Baja Edad Media.
EL CONCIERTO
Según nos explicaba Felipe Sánchez Mascuñano, “El príncipe y el mendigo trata de ser un homenaje a estas culturas, y a las músicas que aquellas representan, dentro de la admiración que siempre he profesado al músico Axivil”. Hasta el punto de que todas las agrupaciones que ha formado nuestro músico a lo largo de los años, han tenido este nombre: Axil Criollo, Axivil Castizo, Axivil Clásico, Axivil Trío…
Una docena de instrumentos de cuerda, viento y percusión, desfilaron por el escenario de la ermita de Alarcos, ejecutados prodigiosamente por Felipe Sánchez, Wafir S. Gibril y María Altadill. Wafir (músico sudanés) al laúd, percusión, viola y ney, además de sugerentes cantos en árabe. Y de María Altadill, ¡qué decir! Una excelente soprano que ya estuvo en la edición 2016 de Alarcos, con el programa “Illerda Antiqua”.
Natural de Tarragona, aunque vive en Lérida, María estudió en la Schola Cantorum, de Basilea. Y desde entonces no ha parado de elaborar programas y realizar grabaciones. Posee una voz limpia, de amplios registros, hermoso timbre y gran potencia.
FELIPE SÁNCHEZ
En cuanto a nuestro Felipe (Sánchez Mascuñano), nos refiere algunas de sus actividades más inmediatas: “Un ciclo de conferencias sobre la historia de la guitara del siglo XIII al XIX”, y tras las grabación de una larga treintena de discos de música antigua, está interesado en la actualidad en la elaboración de videoclips, que se han revelado como un recurso muy adecuado a los tiempos actuales.
En sus actuaciones en el Festival de Alarcos, Felipe Sánchez ha venido una veces como director de su propio grupo, y otras formando parte de otras agrupaciones del más alto nivel, y bajo la dirección de los más significados especialistas de la música antigua en nuestro país.
El espectáculo de este jueves día 20, resultó ameno y ampliamente ilustrado por Felipe Sánchez, y estuvo muy cuidado en su selección y mimado en su ejecución.
