Un espantapájaros que quiere un cerebro; otro personaje, Hojalata que busca un corazón y un León miedoso que persigue el valor que se le supone a los de su especie se dirigen a la Ciudad Esmeralda para que el gran Mago de Oz les ayude a conseguir lo que desean.
En el camino se toparán con malvadas brujas que les complicarán su aventura, y también amapolas, gnomos, animales del bosque y árboles parlantes. La historia ensalza los valores de la amistad, la necesaria colaboración entre seres diferentes. Una hermosa historia en la que se ha mezclado la magia, el humor, la música en una magnífica puesta en escena con escenografías transformables, proyecciones, efectos especiales y unos experimentados actores que se han acabado marchando por el patio de butacas entre los aplausos de un público que ha reconocido su buena actuación. Con la divertida y colorida historia, de una hora de duración, ha disfrutado toda la familia. Un buen Mago de Oz ha pasado esta tarde por Tomelloso.