S.Ruipérez/ Ciudad Real
“Un pintor es un hombre que pinta lo que vende. Un artista, en cambio, es un hombre que vende lo que pinta”. Con estas palabras, del pintor malagueño Pablo Picasso, definen los componentes de Teatro Xtremo su arte, su trabajo.
Su última composición se muestra hoy al público de Ciudad Real, a partir de las 21,00 horas, en el teatro de La Sensación y ya contó con numeroso público anoche.
Bajo el título ‘La imposibilidad física de la muerte en la mente de alguien vivo’, Luisa Torregrosa, Diana Lucena y Ricardo Campelo, los miembros de la compañía, tratan de transmitir sentimientos e intentan explicar al público que “la vida va de vivirla”, apunta Campelo, el director y advierte que “nadie puede pintar la realidad individual de cada uno, mi realidad es que abrazo a quien amo y me gusta dormir con ella, esa es mi vida, la de los placeres reales”.
En este sentido explica, que la obra que hoy se pone en escena, no es una comedia ni una tragedia, si no una función esperanzadora de creadores teatrales que en vez de hacer un trabajo desde el texto, lo llevan a cabo desde las obras plásticas. Y es que la puesta en escena de Teatro Xtremo no necesita de la palabra para llegar al espectador, consigue con otras artes como la música, los olores, los colores o la luz, los sentimientos y sensaciones que pretenden transmitir.
Tampoco les gusta hablar de escenario. Para los miembros de esta compañía la escena, el espacio interpretativo, es toda la sala, aunque tienen muy claro que no se puede invadir la parte del auditorio.
“Somos una generación engañada, -dice Ricardo Campelo-, hicimos todo lo que nos pidieron, somos los mejores tiburones, los mejor preparados, pero al final no hay nada que coger. Estamos quietos, como en formol”.
Con esta metáfora Ricardo explica que el título de esta obra de teatro se corresponde con el tiburón metido en formol del británico Damien Hirst cuyo trabajo tituló 'La imposibilidad física de la muerte en la mente de alguien vivo'. Se trata de un tiburón de algo más de cuatro metros de longitud, suspendido en un tanque transparente de aldehído fórmico.
Un trabajo sorprendente, el de Teatro Xtremo cuyo contenido se adhiere y mimetiza con los sentimientos y da lugar a la libre interpretación de la vida que vive cada cual. El que entra agudiza su estado de ánimo y sale con los sentidos incentivados. Abrazos, olores, música, encuentro, sobre las tablas.
