El Corral de Comedias acogió el viernes la presentación de la obra de Ruiz de Alarcón ‘El desdichado en fingir’, en la versión dirigida por el mexicano José Uriel García Solís, rendida por el Colectivo Teatral de Guerrero.
La enrevesada trama, por otro lado harto frecuente en el teatro del Barroco, muestra las distintas artimañas, sustentadas en el fingir y las desdichas que el mismo genera. Y todo ello para conseguir materializar el amor que los hombres -bien sean nobles o plebeyos- sienten por las mujeres protagonistas de la obra, Ardenia y, en menor medida, Celia. Ambas son requebradas de amor por Persio, Arseno y el Príncipe, quienes acometen la empresa de conseguir la entrega de Ardenia por medio de ardides de distinta ralea.
Cabe señalar que los actores y actrices intervinientes doblaron papel, es decir, interpretaron dos personajes con la diferenciación del atuendo y el proceder en escena. Por tanto fue doble el trabajo desempeñado por Erick Herrera, Luis Enrique Córtez, Pedro Acevedo, Montserrat Hernández, Xitlalli Hernández, Cuauhtémoc Astudillo e Irving Marcelo Hinojosa, al igual que dobló el músico Santiago Marcelo Valdivia, encargado de acompañar con sobriedad el proceder de sus compañeros con una guitarra española y otros efectos sonoros contenidos en un ordenador portátil.
Si sobrio fue el acompañamiento musical, con un adjetivo similar podríamos calificar la impresión global producida por la representación del Colectivo Teatral de Guerrero de ‘El desdichado en fingir’, como por ejemplo correcto, sin más, en la cual, sin embargo, destacó la magnífica actuación del enjuto y muy expresivo Cuauhtémoc Astudillo.
