Cuarenta y un años después de publicar el primer libro, ‘Ciudad Real poesía última’, y pasados veintiocho años de instaurar el sistema de selección de títulos por convocatoria pública, la Biblioteca de Autores Manchegos tiene el motor engrasado. Para el presidente de la Diputación de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, como máximo responsable de la editorial, es una suerte que funcione como lo hace.
“Es un orgullo tener una estructura editorial que permita a los autores de la provincia publicar novelas, estudios, investigaciones sobre asuntos propios o de la provincia, y al mismo tiempo ofrecer a los lectores contenidos que de no ser por la BAM no habrían visto la luz”, reconoce a Lanza el presidente de la Diputación, que es aficionado a la lectura de publicaciones de carácter local.
Así pues, hace referencia a uno de los últimos libros que ha leído de la BAM, ‘El instituto de Ciudad Real y la Diputación provincial: una relación fructífera (1843-1910)’ de Jesús López-Maestre. Valverde explica que este libro “te permite ser más consciente de la importancia de la Diputación en la formación de la identidad de la provincia”, ya que habla de un instituto que formó a cientos de ciudarrealeños para que luego su educación revirtiera en la provincia. “Te anima a ser más defensor de las diputaciones, que han sido cuestionadas”, señala.
Después de cuatro décadas de recorrido no puede hacer otra cosa que agradecer el trabajo realizado y confirma la intención de “seguir manteniendo y reforzando esta estructura editorial que es un servicio público”. De hecho, apoya la organización de trabajo realizada hasta la fecha a través del formato físico.
Nuevos formatos

Para Valverde, con la irrupción del ebook “el formato físico parecía que tenía los días contados, pero se ha demostrado que no es así, que el libro en formato físico está más vivo que nunca, tanto para niños como para adultos”. Por eso, confirma que la apuesta seguirá siendo “fundamentalmente por los libros en papel”, aunque no descarta sumarse a los nuevos tiempos.
“No descartamos, si surge la necesidad y vemos que así puede aumentar la demanda, plantear nuevos formatos para dar respuesta a los lectores que prefieren las nuevas tecnologías”, señala, consciente que hoy en día ya no solo se habla del libro digital, sino también del audiolibro.
Lo “prudente”, dice Valverde, es “dejarse asesorar por la parte técnica”, de la que es responsable Jesús Reviejo, como editor y responsable técnico de la Biblioteca de Autores Manchegos desde mayo de 2019, cuando tomó el relevo de José Luis Loarce, que desde 1985 estuvo al frente de la BAM. “Es el que tiene el contacto directo con las diferentes propuestas creativas”, añade.