Jugar en el Santiago Cañizares ha supuesto esta temporada para el Salesianos encontrarse con un lugar donde siempre ha sido feliz. Ha sido en Puertollano donde ha dejado los mejores partidos en una campaña que, pase lo que pase, será historia y que pese a todo, quiere seguir mejorando para acabar con el mejor sabor de boca posible.
Las de Jaime García saben que esta recta final puede hacerse corta en una carrera al sprint contra Almagro donde sólo quedan quince puntos para decidir quién es el segundo equipo que se gana el derecho a jugar los play off de ascenso a Primera, y sobre todo, quiénes son los condenados a perder la categoría, donde ya figuran los nombres de Albacete y Elche.
De ahí que no quepan los despistes ni las etiquetas de favoritos contra ningún equipo, ni la posibilidad de que pueda ocurrir cualquier cosa de aquí hasta que finalice la campaña 2022-2023.
Este fin de semana las de Puertollano se medirán a un conjunto que vive a medio camino entre el descenso y los puestos que dan derecho a jugar el próximo año la Copa de la Reina, un premio nada desdeñable y por el que seguro sacarán toda la artillería para hacer honor a su nombre.
Para el encuentro, que se disputará este sábado a partir de las 20 horas, el técnico local no podrá contar con Pilar ni con Ehymi, pero sí recupera a Marisol para la convocatoria respecto al último encuentro.
Con la mente libre de presión y con ganas de seguir sumando de tres en tres para vender cara la última plaza de un sueño dorado, Salesianos saldrá a la cancha para disfrutar y rematar el gran trabajo realizado hasta el momento.
