Nueva jornada en la 1ª Nacional de Baloncesto con duelos muy atractivos para varios equipos de la provincia.No falló el líder, Autocares Rodríguez de Daimiel, en su visita a Azuqueca donde ganó 54-59, en un partido en el que los dos equipos defendieron con gran intensidad, de ahí ese bajo marcador de un partido que enfrentó al primero con el quinto de esta Primera Nacional. En el primer cuarto los daimieleños se fueron de siete arriba, 13-20; pero al descanso redujeron distancias los locales para poner el 28-32.
En el tercer cuarto, se mantuvo la emoción y acabó con un empate a 40 que dejaba todo en el aire para los diez minutos finales. Y en este tramo decisivo jugó con oficio el equipo daimieleño que con un parcial de 14-19 puso el definitivo 54-59 en el marcador.
La jornada trajo otro atractivo duelo entre el segundo clasificado, Criptana, y el tercero EBA, que se ha saldado con victoria del conjunto albaceteño, 68-78. Se vio buen baloncesto entre dos excelentes equipos con muchos recursos individulaes y colectivos, pero salieron mucho más contentos los aficionados visitantes por la victoria de los suyos.
El primer cuarto acabó 15-21 y al descanso el equipo local redujo la desventaja de seis puntos, a solo uno, 33-34. Los mejores momentos del equipo local llegaron en el tercer cuarto que terminó con un 52-46 que hacía albergar mucha esperanzas de victoria a los criptanenses. Pero respondió el EBA con un gran último cuarto en el que endosó un parcial de 16-32 a los locales y puso el definitivo 68-78. La victoria permite al EBA arrebatar la segunda plaza al CB Criptana.
Por su parte, el Alkasar Grupo 76 pasó muchísimos apuros para imponerse al colista, Cuenca. Tanto es así que el partido tuvo que ir a una prórroga que decantó el partido a favor de los alcazareños.
El 14-13 con que finalizó el primer cuarto anunciaba ya que Cuenca no venía de excursión a Alcázar. En el segundo cuarto, prosiguió la igualdad y al descanso se llegaría con 35-31. En el tercero, el Alkasar ofreció su mejor nivel y puso un 56-43 que parecía encauzar muy bien el duelo, pero nada más lejos de la realidad. Cuenca no se rindió, peleó y jugó con criterio en el último cuarto y poner un inesperado 66-66. En la prórroga, el Alkasar acabó ganando 73-69 para alivio de sus aficionados que no esperaban un final con tanto sufrimiento.