3-0 (5’); 5-2 (10’); 10-5 (15’); 13-9 (20’); 17-14 (25’); 21-18 (descanso); 22-21 (35’); 24-23 (40’); 27-26 (45’); 28-28 (50’); 30-30 (55’); 33-34 (final).
El ID Energy Caserio salvó su desplazamiento más largo de toda la temporada con una agónica victoria por la mínima sobre el BM. Lanzarote Ciudad de Arrecife en un partido de descontrol total, sobre todo en el primer tiempo, en el que siempre anduvo a remolque de marcador y juego. El equipo de Santi Urdiales estuvo siempre muy incómodo en Titerroy y necesitó de todas sus cualidades y de algo de fortuna, también de varias decisiones de los colegiados cuando menos discutibles, para conseguir meterse en la pelea por el resultado, pero al final y en una segunda parte mucho más igualada conseguiría llevarse la victoria con un gol de Torres tras cazar un rechace en seis metros y a falta de cinco segundos para la conclusión.
No entraron nada bien al partido los manchegos pues no consiguieron ver puerta hasta superado el minuto seis, incluso jugaron en superioridad muy rápido por una exclusión local pocos segundos de que comenzara el duelo, y no volverían a marcar el segundo hasta casi el minuto diez. Tampoco en defensa brillaron y encajaron cinco goles, que con todo incluso se antojan pocos habida cuenta de que el primer periodo sería un carrusel de tantos difícil de explicar a ambos técnicos, que no pocas veces mostraron su digusto con la endeblez de sus equipos.
El tiempo del visitante Santi Urdiales no arregló las cosas de manera inmediata y poco más tarde se vio otra máxima en el electrónico con el 8-2 en el 12´, pero después y al menos el equipo consiguió anotar en inferioridad y quizás eso levantó el ánimo de un grupo que estaba cometiendo demasiados errores en ambas áreas de la pista. Así y después de más de un tercio de encuentro de descontrol total el ID Energy Caserio consiguió meterse en el partido, avisando a su rival de que pagaría caro el menor despiste (15-13 en el 23´).
En el final de primera parte la defensa manchega no mejoró sus prestaciones y siguió sufriendo lo indecible, pero el cuadro visitante sí demostró valentía en el golpe a golpe y a la llegada del paso por los vestuarios por más que las defensas siguieran desaparecidas el marcador estaba algo más ajustado. Al descanso 21-18.
En el reinicio y con otra actitud defensiva bien diferente, pues los locales tardaron cinco minutos en hacer su primer gol, el equipo manchego empató por la vía rápida (21-21) obligando al entrenador local Samuel Trives a pedir un tiempo muerto rápido pues la dinámica había cambiado por completo. Ahora sí había defensas y también algo de protagonismo de las porterías, un choque diferente en el que los pequeños detalles tenían mucha mayor importancia (27-27 en el 16´ y TM de Santiago Urdiales).
La segunda parte del periodo sería muy tensa y competida, con igualdad total y un desenlace final de infarto donde las decisiones arbitrales provocaron no pocas protestas y enfado, especialmente un dos minutos al banquillo por protestar en el tramo final cuando todo estaba por decidirse y también por el excesivo castigo en forma de dos minutos a los locales. Fue con 28-28 en el 20´ la técnica al banquillo y tras gol visitante en superioridad, pero el equipo manchego no recuperó bien y los locales marcaron de portería a portería sin Óscar Ruiz bajo palos. La igualdad se mantuvo en todo momento hasta que por fin el Caserio se puso arriba 31-32 a falta de dos minutos. Finalmente se llegó a la última posesión manchega con empate 33-33, pero tras ese ataque largo y a falta de 5´´ Torres caza el rechace del portero para marcar el 33-34 y llevarse el triunfo después de un ataque local a la desesperada y robo visitante.