Con los deberes hechos, tras vencer a Sinfín Santander, 35-30 y mientras se llenaba el parqué del Quijote Arena de aficionados para abrazar a sus jugadores, los ojos se dirigían a los teléfonos móviles para ver el desenlace del encuentro entre UBU Burgos y EON Alicante.
Los alicantinos tras ir perdiendo en la primera mitad, han sido capaces de darle la vuelta al encuentro, en una actuación soberbia de su defensa, poniendo una diferencia de tres goles (32-35) en el marcador final, que hacía posible que los astros combinasen en línea para que la fase de ascenso caiga en Ciudad Real.
Advertíamos en la previa que este sábado podía pasar cualquier cosa y lo que ha sucedido es que Caserío ha obtenido el premio de ser el equipo organizador de la fase de ascenso, quedando segundo clasificado en la liga regular y con la moral por las nubes para estos partidos decisivos con sabor a Asobal.
La semana que viene Ciudad Real volverá a latir fuerte para empujar a su equipo, que esperan, esta vez sí, obtenga el pasaporte directo que haga posible que la ciudad vuelva a codearse con los mejores equipos de nuestro balonmano nacional.
