PALMA DEL RÍO 25 |
VESTAS BM ALARCOS 32 |
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José María Martín; Raúl Caro, Moisés Godoy (1), Adrián Salas (1), Cristian Reyes (2), Julián Portero (1), Raúl Morales (7), Alejandro Plaza (4), Emilio Díaz, Sergio Antúnez, Carlos González (1), Ángel Povedano (1), Antonio Sánchez (1), Jesús Martínez (2), Julio Morgado (4). Entr: Víctor Montesinos. | Konstantinos Kotadinis, Javi de la Cruz; César Beret (3), Victoriano Gómez-Cambronero (5), Gonzalo Almansa (3), Manu Díaz (), Asier Urain (3), José Juan Serrano (1), Eloy Krook (2), Héctor González (5), Brian Negrete (6), Frank Cordies (1), Sergi Mach, José Mora (1), Dani Peiró, Carles Asensio (2), Óscar Ruíz. Entr: Javier Laguna. |
ÁRBITRO Espino Guerra y Navarro Baquero. |
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PARCIALES CADA 5 MINUTOS 0-5 (5’); 3-7 (10’); 6-10 (15’); 8-13 (20’); 11-14 (25’); 13-17 (descanso); 15-19 (35’); 17-21 (40’); 17-23 (45’); 17-26 (50’); 21-28 (55’); 25-32 (final). |
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INCIDENCIAS Partido de la 16ª jornada en la División de Honor Plata masculina de balonmano, disputado en el Pandero de Palma del Río (Córdoba). |
El Vestas BM Alarcos no falló en la pista del colista, el Palma del Río, al que superó por un claro 25-32 para sumar dos importantes puntos en el arranque de la segunda vuelta. Fue un buen encuentro en líneas generales de los de Javier Laguna, con una gran defensa en muchos tramos y una portería de un alto nivel, sobre todo con un Óscar Ruiz que en la segunda mitad paró hasta 5 penaltis para ayudar a su equipo.
Un 0-4 de inicio dejaba bien claro de qué manera había salido cada equipo al 40×20. Un parcial que obligaba al entrenador local a parar el juego, porque la defensa ciudadrealeña estaba muy por encima del ataque palmeño y eso le permitía correr y marcar fácil.
Y así siguió el partido al menos hasta el 0-6, con eñ Alarcos a la carrera y Palma del Río sin encontrar el camino hacia el gol, que lo encontró en el minuto 6 para lograr el 1-6. Con la salida de Julio Morgado en el pivote, el Palma empezó a encontrar más caminos hacia el gol apoyándose en el poderío en los seis metros y el choque entró en una fase más estática en la que Alarcos también estaba a gusto, como demostró el 3-8 del minuto 10.
La distancia se instaló en los 4-5 goles, pero la defensa alarquista bajó en intensidad y eso lo notó el equipo rival que empezó a encontrar muchas más facilidades a la hora de conseguir fáciles lanzamientos lo que se tradujo en que el 6-9 llegó al marcador, dejando la distancia en solo tres goles mediado el primer tiempo del partido.
Pasaban los minutos y el intercambio de goles dejaba las distancias moviéndose en la misma horquilla con dos equipos más asentados, con menos contrataques y un juego más espedo. Protagonismo para el portero local, que estaba tocando muchos balones impidiendo el despegue definitivo alarquista.
Llegando al final del primer asalto, el Palma del Río se quedó con cuatro jugadores de campo por dos exclusiones seguidas y cinco goles abajo (11-16) y lo salvó muy bien para, inmediatamente después, cambiar papeles ya que era Alarcos el que se quedaba con dos hombres menos. Y a pesar de tanto movimiento en los minutos finales, el primer tiempo terminó tal y como se había desarrollado, con un más 4 en el casillero alarquista. 13-17 en el luminoso y la sensación de que los ciudadrrealeños podían haber dejado el partido casi sentenciado de no ser por la actuación del portero local, los errores propios y el acierto de Julio Morgado en los seis metros.
Segunda parte
Y en la segunda mitad, más de lo mismo. El Alarcos defendía bien y, de salida, retomaba la ventaja de cinco goles con el 14-19 del minuto 4. Pero dos errores alarquistas en un momento volvían a poner a Palma del Río a solo dos goles, 17-19 en el minuto 37. Javier Laguna pedía tiempo muerto porque de no haberlo, de nuevo había partido. El Alarcos estaba algo perdido y era necesario un cambio.
Y salió bien el tiempo muerto. A la vuelta, un parcial de 0-2 y 17-21, de nuevo más 4 para Alarcos. Luego Óscar Ruiz, inmenso, paró dos penaltis seguidos . Y, como consecuencia, llegó el más 5 de nuevo al marcador para el Alarcos obligando al entrenador local a pedir tiempo muerto. Se habían visto en el partido y, de nuevo estaban más fuera que dentro. Era el minuto 43 y el 17-22 ponía las cosas muy de cara al Alarcos. Y de salida, otro más dos para el Alarcos que ponía el 17-23, acercando aún más al equipo de Ciudad Real a la victoria.
De ahí hasta el 17-27, sólo hubo crecimiento alarquista y hundimiento del Palma del Río. Solo faltaba que el pasar de los minutos impidiera la remontada local, algo que ya se intuía en el minuto 52 con el 18-27.
Luego, el exceso de confianza del Alarcos le hizo bajar los brazos, enlazar dos exclusiones, cometer errores y no saber atacar el 4:2 que propuso el Palma del Río. Por ello el más diez se quedó en más 5 a falta de 4:15 para el final. Los palmeños lo intentaron todo, pero ya no había tiempo y el Alarcos no se dejó llevar por los nervios para llevarse una victoria que al final fue de 25-32.