El principal protagonista de la fase de ascenso a ASOBAL de este fin de semana está siendo, antes de que el balón se ponga en movimiento, la falta de espacio en el pabellón Ovni de Sagunto y la escasez de abonos para los equipos visitantes.
Concretamente al Vestas Balonmano Alarcos solo le han llegado 60 abonos que el club ha intentado repartir de la manera más equitativa posible. Eso sí, antes de pensar en cómo realizar ese reparto, los responsables alarquistas han realizado mil y una gestiones para intentar conseguir más abonos para una afición que lleva todo el año esperando la fase de ascenso.
Así las cosas y tras valorar todas y cada una de las solicitudes, la directiva ha determinado corresponder ecuánimemente y con los siguientes criterios de asignación: directivos, jugadores y cuerpo técnico del club, tendrán derecho a 2 abonos; los Abonados Protectores tendrán un abono por persona y el resto de abonos disponibles serán para patrocinadores del club.
Los porcentajes de asignación de los abonos que han llegado al club han sido: 35% a jugadores, 30% a cuerpo técnico, 23% a directiva y 12% a otros.
Mientras, las oficinas del club echan humo con el asunto de las entradas y poniendo en marcha toda la maquinaria para recabar todos los apoyos posibles de cara a la fase de ascenso, el equipo sigue centrado en lo más importante: llegar a tope a la fecha más esperada del año.
Así, los jugadores han tenido tres días de descanso coincidiendo con el puente del pasado fin de semana y este lunes retoman los entrenamientos en horario de tarde para seguir preparando la fase durante toda la semana.
En el aspecto físico, según aseguraba el entrenador, Javier Márquez, el equipo llega muy bien mientras que anímicamente ve a sus jugadores muy concentrados y en un gran momento para afrontar con garantías el choque del próximo sábado de semifinales desde las 20:00 horas ante el Torrelavega. En caso de ganar, la final sería el domingo ante el vencedor del Sagunto-Zamora (16:30 horas).
