Son ya tres ediciones, aunque desde que nació en la Navidad de 2022 ha llamado tanto la atención que nadie se la quiere perder: la Neón Handball Cup ha llegado para quedarse. Esta competición de balonmano jugado ‘a oscuras’ volvió a celebrarse entre el 26 y el 28 de diciembre.
“El torneo despierta curiosidad por el formato en sí. Ya hay mucha gente que viene no sólo a ver a sus hijos e hijas, sino a descubrir cómo se juega”, explicaba Estefanía Marchán, una de las responsables de la organización de este evento que el Handball Manzanares organiza con la colaboración de la concejalía de Deportes del Ayuntamiento.
Lo más característico de la III Neón Handball Cup es que para que pueda disputarse, es necesario que se apaguen las luces del pabellón ‘Antonio Caba’. O, más bien, que se apague la iluminación habitual para que se enciendan los focos de luz negra que, junto con el balón fluorescente, la cinta adhesiva fluorescente que marca las líneas y las porterías y los petos que lucen los y las jugadoras son imprescindibles para jugar.
Alrededor de doscientas personas, divididas en dieciocho equipos, tuvieron la oportunidad de vestirse de corto para probar este balonmano tan peculiar. En esta tercera edición, la escuela deportiva de balonmano y el Handball Manzanares aportaron sus equipos alevines, infantiles, cadetes, juveniles y sénior, tanto masculinos como femeninos. A ellos se les sumaron el Club BM Bailén, que se estrenó en la competición, además de BM Daimiel y BM Quijote Herencia, cuyos jugadores y jugadoras repitieron un año más.
