Jorge Ureña
Ciudad Real
Que al Seguros Soliss Caserío Ciudad Real de Primera Nacional le urge lograr su primera victoria de la temporada es algo que sobra decir, pero Fernando Imedio, su entrenador, no quiere hablar de presiones ni urgencias.
Ayer, en la rueda de prensa habitual antes de cada jornada, reconocía que en el vestuario existe esa sensación “de ansia, de rabia por haber perdido partidos muy ajustados, pero hay que pasar página porque ese estres puede pasarnos factura”.
Su mensaje al equipo es claro: “la gente tiene que quitarse esa presión de ganar”.
Pero lo que está claro es que equipo y afición llevan ya cinco jornadas esperando la victoria y esta no llega aunque, como en el caso de la pasada jornada en Lanzarote se jugara bien. De hecho para Imedio se jugaron “los mejores 50 minutos de lo que llevamos de competición”.
Así que con la idea de intentar jugar tranquilos, el equipo recibe mañana (19:00 horas Príncipe Felipe) al Cajasur Córdoba, un equipo del que Imedio dice que “este año por la salida de jugadores o por la competición tan extraña que tenemos, parece que no esta siendo tan bueno como el año pasado. Tiene una plantilla muy joven con mucho futuro y no podemos fiarnos de ellos”.
En cuanto a su equipo, del que reconoce que “dan el cien por cien en cada entrenamiento y en cada minuto de partido”, Imedio tiene la baja de Mateo Turkovic que sigue recuperándose del esguince del pulgar de la mano derecha que ya le impidió jugar en Lanzarote. Además tiene a Pepe Casas tocado aunque todo parece indicar que llegará a la cita con los cordobeses.
Cita importante en la que, una vez más, la afición amarilla tiene que ser fundamental para el equipo.
Dice Fernando Imedio que “Caserío es una gran familia y cuando hay que estar más unidos es en los momentos duros”.