25
29
2-3, 3-3, 7-4, 10-9, 10-12 y 14-15 (descanso); 15-18, 16-21, 20-23, 20-24, 23-26 y 25-29.
El ID Energy Caserío desaprovechó la oportunidad de subirse de nuevo al liderato. Perdió este domingo ante el Ibiza por 25-29, en el primer error cometido esta temporada en el Quijote Arena. No fue el día de los amarillos y sí de un rival que parecía por momentos en estado de gracia para llevarse así el triunfo, rompiendo la imbatibilidad local en casa tras ocho victorias consecutivas. Los de Santi Urdiales, que se entregaron como siempre hasta el final, se quedan terceros en la tabla, a dos puntos de Burgos y Guadalajara, empatados ambos al frente de esta División de Plata en la que, como siempre dice el técnico, cualquier rival te gana si no estás al 100%.
Empezó el partido con alternativas ante las férreas defensas, que propiciaron exclusiones de inicio en uno y otro equipo. Óscar Ruiz aparecía bien bajo los palos de la portería, para permitir al Caserío estar con una mínima ventaja pasado el minuto 10 (4-3).
Hasta ese momento ambos habían cometido errores en ataque, algo que mejoró el conjunto de Ciudad Real. Campanario, con uno de sus lanzamientos típicos de cintura, y Orlandi mantenían a los amarillos por delante. Luego Adrián Sánchez, desde el extremo, puso los tres goles de ventaja (7-4, min,. 15).
Siguió mejor el Caserío, que había ya cogido definitivamente el ritmo y la intensidad al partido. Campanario, al contraataque, firmó el 9-5, la máxima diferencia que llevó al entrenador del Ibiza a solicitar un tiempo muerto. Los de Santi Urdiales parecían ya llevar el choque a lo que querían.
Pero ese parón permitió la reacción del Ibiza. Volvieron los errores en ataque de los locales y el rival lo aprovechó con un 4-0 de parcial que equilibraba de nuevo el duelo, con Samuel Pereiro superando con sus tiros la portería de Óscar Ruiz (9-9, min. 19). Parecía empezar todo de nuevo.
Se puso por delante de nuevo el Ibiza, algo que solo había hecho previamente con el 2-3. Lo hizo, además, por dos goles, un 10-12 que obligó entonces a Santi Urdiales a parar el partido en los peores minutos de su equipo.
Aprovechando la superioridad numérica por exclusión de un jugador del Ibiza, el Caserío puso de nuevo la igualada (12-12). Duró, poco, dos goles del extremo Diego Prada volvieron a colocar a los visitantes con dos arriba. En el último segundo, con un jugadón de pase de Ángel Pérez y tiro en vuelo de Campanario, los de Ciudad Real la redujeron a uno (14-15 al descanso).
Segunda parte
No empezó bien el Caserío la segunda parte y lo aprovechó el Ibiza para coger su máxima renta, los tres goles con el 15-18. Palacios salió entonces por primera vez en el ataque de un Caserío que seguía espeso y que vio que el rival no erraba para aumentar la diferencia a cuatro tantos.
Le salían pocas cosas a los amarillos, para colmo un error desde los siete metros de Ángel Pérez. Con 16-20 en el minuto 9 de la segunda parte, Urdiales volvió a solicitar un tiempo muerto. Había que mejorar en busca de la remontada.
Buscando un cambio, el técnico local jugó vació portería y jugó con siete en ataque. No funcionaron los primeros ataques, que llevaron a un cinco abajo, Sí los siguientes para meterse de nuevo en el partido, reduciendo la desventaja a tres goles.
No se descomponía el Ibiza pese al arreón local. Al cuadro visitante, por contra, le salía todo y mantenía la ventaja con un muy acertado Samuel Pereiro. Santi Canepa apareció entonces en el ataque de un Caserío que no lograba recortar la diferencia y que, para colmo, veía cómo el rival volvía a los cinco arriba justo cuando se entraba en los diez últimos minutos de partido (20-25). De nuevo, tiempo muerto de Urdiales.
Atacando con siete y aumentando la intensidad defensiva, pudo recortar el Caserío la diferencia a dos goles, tras dos paradones de Óscar Ruiz (24-26). Quedaban poco más de cuatro minutos y había mucha esperanza y presión en el Quijote Arena. Parecía que el Ibiza aguantaba la compostura, pero el Caserío no se rendía, aunque una pérdida de Adrián Sánchez cuando se disponía a lanzar para ponerse a un gol fue ya la puntilla final. Quedaba entonces un minuto y ya el Ibiza no perdonó para terminar ganando por 25-29 a un Caserío cuyo próximo partido será la visita a la difícil pista del filial del Barcelona.