El Club Balonmano Caserío ha abierto el capítulo de renovaciones en su plantilla de cara a la próxima temporada. El conjunto amarillo ha oficializado las continuidades del argentino Thomas Werner, en el extremo, de Imanol Rodrigo, en portería, y de Pablo Campanario, en el lateral.
Tres nombres confirmados para el próximo curso, junto al técnico Santiago Urdiales, que sirven al conjunto amarillo para ir sentando las bases del proyecto de la nueva temporada en Primera Nacional. Un proyecto con más ilusión si cabe, tras no haber podido competir por el ascenso tras la finalización forzada de la competición. Solo la diferencia de goles particular con el BM Ikasa Madrid ha privado al club amarillo de saborear la categoría de plata, objetivo por el que volverán a luchar el próximo año.
La idea fundamental para el técnico Santi Urdiales, tras los buenos resultados obtenidos hasta ahora, es la continuidad del bloque. Con estas renovaciones, y más que se anunciarán en los próximos días, la directiva trabaja para lograr ese objetivo. Al mismo tiempo se ha comenzado a valorar posibilidades y nombres para reforzar el plantel de una esperanzadora temporada. En cuanto a bajas, ya se ha anunciado la de Pau Ferre, cuyo destino será el Atlético Novás de la División de Honor Plata.
