El FC Barcelona celebró en A Coruña su 25º Campeonato Nacional de Liga con la victoria (2-4) este domingo en Riazor, culminando en la jornada 35 de LaLiga Santander un dominio sin rival e invicto en el proyecto de Ernesto Valverde, provocando también de manera matemática el descenso a Segunda del Deportivo de la Coruña con la actuación destacada de Messi, autor de un triplete.
El cuadro culé culminó la reconquista liguera, sucediendo al Real Madrid y confirmando una década de regularidad, con el séptimo título en los últimos 10 años. Un torneo doméstico en el que canta el alirón sin conocer la derrota, con cuatro partidos pendientes, y superando de la mano de Messi a los gallegos, rebeldes a su destino. Valverde da al Barça el doblete en su primera temporada.
El dominio azulgrana deshojaba la margarita desde Navidades y en Riazor terminó con las cuentas. El Dépor plantó cara, pero el Barça se esmeró en guardar la calculadora, con los goles de Coutinho y un Leo Messi autor de un triplete para pasar (32) a Salah por la Bota de Oro. Pasó por apuros el equipo de Valverde, por aflojar, relajar en defensa y no tener un buen funcionamiento en el centro del campo.
El cuadro gallego llegó a creer en el milagro de estirar sus pocas opciones de permanencia, pero Messi sentenció la liga, para cerrar la temporada culé con el doblete, una semana después de la consecución de la Copa del Rey. El ’10’ echó el cierre en Riazor, para pensar ya como mucho en el Clásico del próximo domingo y la celebración en el Camp Nou, antes de ya mirar al Mundial.
