La Escuela Rayfer de Boxeo de Ciudad Real ha vuelto estos últimos meses a combatir sobre el ring con varios de sus boxeadores. La última velada que organizó fue allá por el año 2019, en el Auditorio municipal de la capital. Después llegó el Covid y un largo parón sin pelear. Sí dando clases en el coqueto gimnasio de la zona baja del pabellón Quijote Arena, pero sin exponer su trabajo al público. Ahora, en este 2024, esta gran escuela cuyo entrenador del Rafael de la Cruz ha decidido retomar las peleas y las veladas para su equipo amateur. Este deporte vuelve así a mostrarse en la provincia y a pasear el nombre de Ciudad Real por diferentes gimnasios y lugares de España.
“Es verdad que hemos estado unos años con la competición parada. Esto requiere mucho tiempo y mucha dedicación. Ahora, por circunstancias, podemos estar más volcados y hemos juntado a boxeadores para ello, algunos que estaban antiguamente con nosotros y otros de una nueva terna”, cuenta Rafael de la Cruz.
Rafa es hijo del ex boxeador y entrenador Rafael de la Cruz, el del Rayfer como es muy conocido en Ciudad Real. Como técnico logró llevar hasta a quince boxeadores a proclamarse campeones de España en una época en la que Ciudad Real contó con grandes púgiles como el ciudarrealeño Juan Carlos Díaz Melero ‘Chupete’ o el malagonero Javicha.
“Desde que tengo uso de razón siempre he estado vinculado al boxeo. Mi padre siempre me llevaba en la esquina. Antes, tenía abajo en mi casa el gimnasio y de pequeño ahí me quedaba dormido. Me ha inculcado esto del boxeo en todo lo que ha podido, siempre me ha llevado y la verdad que le estoy muy agradecido por inculcarme este bonito y noble deporte, porque sí, los golpes son lo que lo determina, pero son golpes todos regulados, es una agresividad regulada. Y no es solo eso, eso lo ves ahí en un combate, pero previamente hay detrás un gran trabajo con nobleza, sacrificio, constancia y humildad. Son grandes valores que me ha inculcado”, explica Rafa ‘júnior’.
En esa época y con ‘Chupete’, dos veces campeón de Europa y cuatro de España en profesionales, como “gran referente” del club Rayfer a nivel provincial, nacional e internacional, Rafa de la Cruz recuerda veladas de nivel con sede en Ciudad Real, como aquella de Chupete en la que perdió con Romanov por el título europeo en el pabellón Puerta Santa María en 2006. O apunta igualmente a las peleas aquí de Javier Castillejo, Manolo Calvo o Manel Berdonce.
Un equipo de cinco boxeadores
Con esos bonitos recuerdos en Ciudad Real, donde, como comenta, hay una gran afición al boxeo y la gente siempre ha respondido en las veladas, la Escuela Rayfer ha vuelto al ring para renacer este deporte en la capital y provincia. Ahora cuenta con un equipo amateur formado por cinco boxeadores: Álex ‘El Principito’ Aguirre, Pablo Rodríguez, Aitor ‘El Animal’ Grande, que es el capitán del equipo y el que más tiempo lleva, además de Daniel ‘El Potro’ Sepúlveda y Daniel Guerrero, este último también entrenador.
Ya son varias las veladas y los combates que han llevado a cabo en este año, en general con buenos resultados. En Elche, en el gimnasio del Rayo Vallecano de Madrid, en Los Yébenes o en Cuenca han peleado varios de sus integrantes, además de pujar también por títulos regionales.
En cualquier caso, Rafa de la Cruz y sus pupilos tienen claro que, “vamos combate a combate. Lo que más nos interesa es coger rodaje, coger experiencia, toda la actividad que sea posible de veladas para rodar a los chicos”. Y con esa idea, la meta pasa por llevar los máximos boxeadores posibles a los Campeonatos de España y a los diferentes campeonatos nacionales. “Ya con el tiempo, ojalá algunos de nuestros boxeadores puedan pasar a profesionales”, dice el entrenador.
Un paso al profesionalismo que es tan grande como dificultoso, porque “requiere mucho trabajo y es ya otro tipo de entrenamiento”, apunta. Primero hay que ‘pulirse’ en amateur, hacer muchos combates y coger una gran experiencia. En eso es en lo que trabaja la Escuela ahora mismo para tratar de que en unos años pueda volver a contar con algún boxeador en la élite.
“Ahora queremos mover a nuestros boxeadores de aquí de la provincia, que les conozcan los aficionados y los que no son aficionados al boxeo también. Hay muy buenos boxeadores y buscamos que ellos disfruten y también la gente”, reitera Rafa de la Cruz, para lo cual están organizando de nuevo esas veladas con la confianza de que la afición responda y los deportistas sigan cogiendo experiencia en el ring.
Un objetivo que ha vuelto a renacer en una mítica escuela de Ciudad Real que abrió sus puertas hace muchos años y que actualmente cuenta con unos 80 inscritos de todas las edades y que dan clases de todo tipo relacionadas con la actividad física y con el boxeo. Unos lo hacen por mero ocio y disfrute. Otros por eso mismo y ya con vistas a participar en combates y alcanzar grandes metas. Ahora, la Escuela Rayfer, les quiere ayudar con su regreso al ring en espectaculares veladas. Tras varios años parado, vuelven al combate.
DANIEL ‘EL POTRO’ SEPÚLVEDA : “Me gustaría ejercer como profesional”
Con varios paréntesis, Daniel Sepúlveda lleva diez años practicando el boxeo. Ahora, con la Escuela Rayfer puede competir y, como él dice, “reflejar el trabajo que llevamos haciendo desde hace tiempo”.
A sus 28 años, se plantea a corto plazo poder convertirse en campeón de España. Y, especialmente, “ejercer como profesional”. “No sé si lo conseguiré, pero ganas y empeño le voy a poner. No digo de ganar mucho o poco. Me gustaría ser profesional”, añade un boxeador que asegura “amar este deporte” y que, no en vano, su trabajo actual es monitor de boxeo.
ÁLEX ‘EL PRINCIPITO’ AGUIRRE: “Quiero mejorar día a día ”
Tras dejar el fútbol, Alejandro Aguirre se compró un saco de boxeo que puso en casa y donde practicó durante más o menos medio año. Después se apuntó a la Escuela Rayfer y ya reconoce que se enamoró de este deporte. A sus 23 años y ya combatiendo en veladas, explica que el objetivo que tiene “es ir mejorando cada día, creo que lo estamos haciendo y que se va viendo”. Lo hace en esta escuela, de la que destaca su labor: “Aquí viene gente de todo tipo, no solo los que competimos Yo creo que a cualquier persona, por muy lejos que vea el boxeo o le dé miedo, si viene un día a entrenar, le va a encantar”.