El parón navideño no le ha sentado bien al Cabezuelo Socuéllamos que ha desperdiciado este inicio de año para dar un zarpazo en la parte baja de la clasificación dejando más hueco y más hundidos a sus inmediatos perseguidores.
Han sido dos oportunidades de oro que se la han ido a un equipo que acabó bien 2024 con una clara mejoría en su juego y que ha vuelto a esa versión en la que le ha costado mucho esta temporada sacar resultados.
Tras pinchar la semana pasada contra Cesur, la de hoy era una victoria obligatoria; algo que no ha sucedido y que aprieta todo un poco más en la parte baja de la Tercera FEB.
Sobre el partido que ha terminado 86-65, Cabezuelo dejó varias versiones; una con más corazón que cabeza que permitió al equipo rival poner tierra de por medio en el primer y último cuarto; otra más efectiva, pero insuficiente fue la que se vio en el segundo y tercer cuarto, donde el juego fue igualado.
Quero, Fox y Vilches fueron los tres referentes ofensivos de de los socuellaminos; opciones, que siguen siendo las más usadas durante todo el campeonato y que necesitan de una versión más coral del equipo para rentabilizarlo.
Toca hacer reset y empezar de cero, pero lo cierto, es que estas dos semanas han sido un auténtico mazazo para la moral de un Cabezuelo que necesita sin remedio, mejorar si quiere mantener la categoría por la que tanto ha luchado.