El Calvo Sotelo dijo adiós al sueño de la Copa del Rey después de un partido que trabajó hasta la extenuación. El equipo industrial plantó cara a todo un UCAM de Murcia y consiguió ponerse por delante por medio de Domenech, pero ese gol de Mounir al borde del descanso hizo mucho daño hasta finalizar los noventa minutos con tablas en el marcador. Ya en la prórroga, Mustafá finalizaba un buen pase de Aketxe después de una imprecisión en la línea defensiva y el cuadro industrial tuvo sus opciones de igualar la contienda, pero al final, el UCAM de Murcia se llevó el gato al agua y consiguió clasificarse para la Copa del Rey.
Tras finalizar el partido, Darío se sinceraba ante los medios de comunicación al señalar que “lo primero que quiero decir es que me siento súper orgulloso de pertenecer a este club. Agradecemos a la afición el ánimo que nos ha dado en todo momento. Estoy muy orgulloso del trabajo de mis futbolistas. El sabor es agridulce porque creo que hicimos un esfuerzo enorme y creo que hicimos las cosas bien. Supimos sufrir cuando tocó e hicimos sufrir al UCAM cuando tocó”.
Repasando el partido, el técnico de Calzada comentaba que “en la primera parte marcamos el gol y ellos tuvieron alguna ocasión. Cuando nos empataron dimos un paso adelante. No digo que no fueran superiores, pero tampoco nos sentimos tan inferiores en el partido. El UCAM tiene un gran físico, con gran experiencia, pero en muchos momentos les pusimos en apuros e incluso pudimos empatar. Tenemos que seguir corrigiendo errores”.
Cuestionado por el aspecto físico y por esa cita de este sábado en Almansa, donde podría ser el debut del Calvo Sotelo en liga, Darío Martín apuntaba que “después de 120 minutos, esperemos que no nos pase factura. El vestuario está rendido. Me preocupa el nivel físico, pero hay que recuperarse lo mejor posible. Ojalá podamos arrancar la liga. Toca centrarse en la liga y ojalá empecemos con buen pie y haya continuidad”.