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0-1 Laura (min 9) y 0-2 Silvia (min 18).
Tras un empate que supo a muy poco en la pista de Chiloeches, Salesianos volvía este fin de semana a su casa, donde suele refugiarse para encontrarse con su mejor versión. Jugar ante los suyos era la mejor noticia para una jornada, donde el equipo se presentaba sin su mejor jugadora hasta el momento, Laura Latorre, sancionada y sin posibilidad de contar con sus dos flamantes fichajes.
Pese a que ha recibido esta semana luz verde, Merlín no podrá estrenarse de momento, hasta que se recupere de su intervención quirúrgica. También espera Juanita, para que el milagro se obre y le permita saltar a la pista para estrenarse con la camiseta amarilla antes de Navidad.
Pese a todo, Salesianos quiere huir de excusas y competir con lo que toque en cada momento. Así saltó el equipo a la pista, concienciadas de que había que aprovechar cualquier oportunidad frente a un rival que llegaba a Puertollano crecido y en un muy buen momento de forma.
Intentaron las de Óscar Horna aguantar bien replegadas sobre su propia pista, a un Rivas que saltó mandón y con ganas de reivindicarse en el Cañizares.
Pronto llegaron los primeros avisos de las madrileñas que se encontraron con la respuesta de Nena, muy atenta sobre su portería. Tuvo que recurrir Salesianos a las jugadas de estrategia para acercarse sobre el área rival, sin encontrar el premio del gol.
En el minuto 9, llegaría el 0-1 en una buena jugada que encontró Silvia sobre la salida de Nena, poniéndola por encima de la meta, encauzando un choque donde la efectividad iba a ser clave.
El tanto obligó a las de Puertollano ha cambiar su propuesta en pista, subiendo su línea de presión a pista contraria, buscando un robo cerca de la portería de Andrea, que les permitiese poner la igualdad en el marcador.
Pese a que no cejaron en su intento las de Horna, no encontraron el tanto y eso, fue minando la moral y el físico de un conjunto que llegó a la jornada cogido con pinza, que sufrió un nuevo mazazo con el 0-2 con el que concluyó la primera parte.
Salesianos echa de menos los goles de Latorre
La segunda parte sería un calco de lo visto en la pista durante los primeros 20 minutos. Mientras que Rivas dominaba la pelota buscando ampliar la renta para matar el duelo, Salesianos mantenía la defensa adelantada, achuchando al equipo madrileño, que no encontraba espacio para llegar a pista contraria.
Se vieron muchos fallos de imprecisión en la circulación de pelota y pocas ocasiones de gol. Las locales lo intentaron de todas las formas posibles, pero sin peligro. Miraban al banquillo buscando soluciones, pero las posibilidades eran las que eran.
No obstante, en fútbol sala, dos goles no son nada y el equipo decidió esperar a los últimos minutos para buscar acortar la diferencia sacando a la portera jugadora. El intento sería en vano, contra un rival que supo aprovechar la situación con la que llegaron las mineras al partido, llevándose tres puntos y dejando la sensación de un Salesianos que hasta que no cuente con todas sus piezas tendrá que sudar sangre, sudor y lágrimas -como lo están haciendo- para no despegarse de los puestos que dan opciones a la disputa del play off de ascenso.