El Socuéllamos cae a puestos de descenso

El Yugo Socuéllamos entra por primera vez en descenso después de cosechar una nueva derrota frente a un renacido Cerdanyola que empieza a creer que la salvación es posible. Los de Sergio Campos confirmaron su tendencia a la baja con uno de sus peores partidos como visitantes. Ya son tres los partidos sin ver puerta y lo peor es que en Fontetes ni siquiera dio la sensación de poder llevarse algo positivo. Bruno Lorente inauguró el marcador con un potente disparo desde el interior del área, tras cabecear Dani Ruiz un saque de banda, y Gonpi puso la puntilla con un certero cabezazo picado a la cepa del poste de Diego Nieves, tras un centro medido de Max Marcet.

Se le está haciendo muy largo el invierno a un Yugo que se ha olvidado de ganar… y de marcar. El que no hace tanto parecía un equipo reconocible, bien armado y con argumentos sobrados para pelearle los partidos a cualquiera, se ha convertido en un rival incapaz de generar siquiera ocasiones de gol Y, ayer, blando también en defensa, que quedó retratado en los dos goles, con los dos firmantes libres de marca para batir a Diego Nieves.

Desde el inicio se vio que el voluntarioso Cerdanyola, que solo había conseguido ganar un partido ante su público, frente a la Gimnástica Segoviana allá por noviembre, está empezando a cogerle el punto a una categoría a la que llegó de rebote, tras el “ascenso” del Talavera a Primera Federación. Óliver Ballabriga sustituyó un par de meses atrás en el banquillo al eterno Toni Carrillo y, poco a poco, ha logrado que los ‘verds’ compitan de tú a tú, con el refuerzo que le dan los últimos resultados.

El ‘Sarda’ inquietó el área socuellamina en los primeros minutos. Cifuentes replicó con una de las pocas oportunidades dignas de mención de los de Sergio Campos en todo el partido. Su disparo en el minuto 12 se marchó fuera por poco. Y, a partir de ahí, monólogo local con sendos remates de Nils Puchades atajados por Nieves, y una secuencia de acercamientos en los que ni Marcos, ni Max Marcet, ni Puchades ni Noel encontraron portería. Lo habitual por esos lares: muchas llegadas y poca puntería. El primer tiempo finalizó con un tímido intento de Facu, cuyo libre directo se marchó fuera.

Siguió la misma tónica tras el descanso, pero, esta vez, si acertaron los vallesanos. No estuvo atento el equipo azul a un saque de banda sin aparente peligro. Dani Ruiz le ganó el salto a su par y el balón le cayó botando al lateral Bruno Lorente, al que nadie vigilaba porque normalmente habría sido él el que sacara desde la banda. Cañonazo cerca de la escuadra y primer gol local.

No encajó bien el tanto el equipo de Campos, que introdujo a Antonio, Barahona y Palomino para cambiar la dinámica del partido, sin conseguirlo. Al contrario, el incisivo Marcet llegó a la línea de fondo, levantó la cabeza y se la puso templada a la cabeza de Gonpi, quien aceptó el regalo y la colocó con la testa lejos del alcance del portero.

Todo resuelto, porque al ‘Socu’ le salía todo mal y apenas amagó con otra falta fuera de Facu y un disparo de Palomino desde el interior del área que golpeó en un defensa cuando llevaba muy buena dirección. El próximo domingo (12,00 horas) tendrá otra final en el Paquito Giménez frente a un Alcorcón B que también viene de menos a más.