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min. 1, 0-1 Pol Pacheco. Min.5, 0-2 Carrasco. Min.8, 0-3 Saura. Min.11, 0-4 Pol Pacheco. min 29, 0-5 Solano; min.31 1-5 Raúl Campos, min.31, 1-6 Alberto; min.32, 2-6 Pedro Herreros; min 33 2-7 J.Mario; min.33, 3-7 Alonso
El Viña Albali Valdepeñas ha conseguido una gran victoria en el derbi ante el Quesos Hidalgo de Manzanares, 3-7. Apoyados por una gran afición, los vinateros pusieron pronto tierra en el marcador y pudieron jugar el partido que querían: defendiendo con intensidad para recuperar y salir rápido en letales contras que casi siempre llevaron peligro.
Golpeó rápido el Viña Albali con un gol de Pol Pacheco en el primer minuto. Agarró un buen disparo raso que no pudo detener Javi Bule. Pudo llegar la igualada en la siguiente jugada, pero lo impidió el palo. El partido tuvo el comienzo que se esperaba entre dos equipos que se conocen sobradamente y que andan muy a la par en la clasificación: intensidad, presión y mucho rigor táctico para equivocarse lo menos posible. El espectáculo estuvo en la cancha y también en las gradas con una nutrida representación de las dos aficiones que animaron sin cesar a sus respectivos equipos.

Viña Albali convertía en oro todas sus llegadas y a los 5 minutos. Tras el saque de un córner, Carrasco ganó la posición de remate en el primer palo para hacer el 0-2. Le tocaba remar aguas arriba a un Quesos Hidalgo Manzanares que no encontraba su mejor versión de juego, todo lo contrario que el equipo visitante, sólido en defensa y con muchos argumentos en su ataque. En el 8 llegó el 0-3, calidad en el autopase de Saura y también en la finalizacion. Y solo tres minutos, Pol Pachego regateó hacia dentro para efectuar un potente disparo que entró por la misma escuadra, otra vez imposible para Javi Bule.
Intentó reducir diferencias el Manzanares que mejoró su circulación de pelota, pero que sufrió para superar a la defensa vinarera que vio como se alzaba la banderola de la quinta falta acumulativa. El tiro de Zequi se topó con el palo y los locales reclamaron un penalti por derribo que los colegiados no consideraron como tal. Con menos de un minuto para alcanzar el descanso, cometió su quinta falta también el Manzanares en el que se retiró Álvaro con su tobillo lastimado. Al intermedio, 0-4, con un Valdepeñas que siguió mostrando su gran poder en el tiro con Eloy Rojas e incluso el portero Marcao, que hizo un soberbio partido, estuvo cerca de marcar.

Cuatro goles eran una renta holgada, pero en futbol-sala las hemos visto de todos los colores y el Quesos Hidalgo salió fuerte buscando ese gol que le metiera en el partido. Tuvo ocasiones en los primeros minutos de la reanudación y reclamó un penalti por posible mano. Dialogaron los colegiados, pero finalmente no decretaron la pena máxima. El banquillo local protestó airadamente la decisión.
Todo se puso más en contra al equipo manzanareño con la expulsion de Pedro Beraldo que encendió aún más los caldeados ánimos en el pabellón. Y cuando la superioridad de los dos minutos estaba a punto de finalizar, Solano, con un gol de tacón, hizo el 0-5 que ya era un lastre demasiado para el Quesos Hidalgo Manzanares. Empezaron a jugar de cinco los locales para buscar ese gol que cambiara las revoluciones del partido, lo marcó, por fin, Raúl Campos, en el 31, casi sin ángulo, un gol precioso. Aunque la alegría fue efímera porque Alberto respondió de manera fulminante con el 1-6. Y en unos minutos de locura, Pedro Herreros hacía el 2-6.
Con el Quesos Hidalgo volviendo a arriesgar, anduvo listo José Mario para hacer el 2-7en el 33 tirando a puerta vacía; con la respuesta rápida de Alonso para hacer el 3-7 solo treinta segundos después. Ese rigor táctico de la primera parte había pasado a mejor vida y el duelo era un frenético ida y vuelta con los dos equipos desatados en ataque. El talento el equipo local lo ponía Raúl Campos y el trabajo en los visitantes, un infatigable Carrasco. Estuvo cerca el 3-8, pero la bocina sonó antes de que el balón entrara. El derbi se fue a Valdepeñas.