El Barça despierta al Valdepeñas de su sueño copero

Valdepeñas despertó del sueño sin la Copa de España en sus manos. Un sueño precioso, inolvidable, que gestó un equipazo a toda su ciudad y a la provincia durante cuatro días para el recuerdo. Un sueño para la historia que alcanzó hasta el medio tiempo de la final, porque al descanso el Viña Albali iba en ventaja en el marcador. En la segunda parte el Barça no perdonó para llevarse el título por segundo año consecutivo. ‘”Orgullosos de nuestros jugadores”, gritaba la afición azulona al término del encuentro, con la ilusión de la Copa ya frenada. Efectivamente, ha sido un sueño para sentirse orgullosos de unos jugadores que lo han dado todo en la pista del Martín Carpena. Habrá, seguro, otra oportunidad.

Ahora, a pocos minutos del final, el amargor es grande. Pero lo realizado habrá tiempo para digerirlo y para escribirlo en la historia de un club que, desde lo más abajo, ha llegado a la cumbre. No se ha llevado la Copa el Viña Albali Valdepeñas. Sí se ha llevado el reconocimiento de todo el fútbol sala nacional. Un subcampeonato triste en estos momentos, pero que se recordará siempre en Valdepeñas. Y en los anales de la Copa de España. Todavía queda la Liga. Allí el Valdepeñas también tendrá mucho que decir.

El inicio fue eléctrico, de alternativas y de alta tensión. Bien apareció el Valdepeñas sobre la pista, firme en defensa y suelto en ataque, con Chino como principal baluarte. La ocasión más clara llegó a los cinco minutos, en una diagonal que remató solo Dani Santos, pero paró Juanjo. Avisaban bien los azules en el inicio de la final, aunque Ximbinha se quedó luego solo ante Edu Sousa, que volvió a aparecer. No podía haber despistes, porque el Barça amenazaba arriba.

A balón parado Catela rozó el palo. Seguía la igualdad en el juego y en las ocasiones con la primera parte llegando ya a su ecuador. Cainan y Chino lo volvieron a intentar desde lejos sin fortuna, mostrando que el Valdepeñas continuaba sólido. Tanto, que el técnico del Barça, Andreu Plaza, solicitó un tiempo muerto. No parecía ver muy bien el partido para los suyos.

Tras ese parón golpeó el Valdepeñas. La estrategia en una falta lateral la finalizó Chino, cuyo disparo se coló por debajo de las piernas de Juanjo para hacer el 1-0. Los azules ya estaban por delante en el minuto 12 de encuentro y se les veía cómodos, con el control. Todo iba perfecto.

Hasta ‘olés’ se coreaban en el Martín Carpena, en una jugada de múltiples pases de los azules. No podían los de amarillo (el Barça en este encuentro), que chocaban una y otra vez con la muralla defensiva local, siempre bien posicionada, siempre con ayudas.

Apretó algo más el Barça en los minutos finales del primer tiempo. No podía ser todo tan fácil. Adolfo disparó al palo en la más clara ocasión del rival, contestada a los pocos sesgundos con un robo de Nano, para plantarse cara a cara con Juanjo y estrellar el balón en el meta. El cierre puertollanero tuvo varias así en esta Copa cuya final llegó al descanso con la ventaja para el Valdepeñas de 1-0. Quedaban 20 minutos y el sueño estaba muy vivo.

Rozó el Barcelona el empate en un arranque fulgurante suyo de segunda parte. Hasta tres claras tuvo. Y a la cuarta no perdonó Adolfo en un despiste defensivo a la salida de un córner que aprovechó para rematar solo a gol. El 1-1 llegó al Carpena y ya el Valdepeñas estaba incómodo sobre la pista. Había cambiado el partido. Tocaba sufrir como ante el Movistar Inter.

Reaccionó atacando el Valdepeñas, al que un milagro para el Barça le quitó el gol. Triple fue la ocasión consecutiva en rechaces, pero Juanjo y el palo las salvaron. El meta rival hizo de Edu Sousa en esta oportunidad, que sirvió para alentar a la grada.

Cerró líneas el cuadro vinatero atrás. Pero no pudo predecir el segundo gol del Barça. Una falta de Aicardo se coló por debajo del muro Edu Sousa para poner el 1-2. Se repetía el guión de semifinales. Había que creer en otra remontada. Quedaban más de once minutos.

La cosa se complicó más todavía. Boyis, en un disparo lateral, desde la banda, se soltó un disparo que sorprendió a Edu y que colocó con el 1-3.

Era el más difícil todavía. Pero Valdepeñas nunca se rinde y segundos después Chino devolvió la esperanza con un soberbio disparo desde el lateral. Era el 2-3 que devolvía el espíritu y el ánimo a los azulones.

Pero en medio de la locura, el Barça volvió a golpear con más fuerza. Ni el videoarbitraje, ante una posible mano, evitó el gol de Marcenio que colocó al contrincante de nuevo con dos de ventaja.

Tampoco estaba la fortuna esta vez de cara. Dani Santos estrelló un balón en el palo a falta de cinco minutos. No se rendían los de Valdepeñas, que con 4:29 por jugar pusieron a Dani Santos de portero jugador. Las tuvo para recortar la diferencia, pero a 1:05 Catela frenó con la mano una contra que era gol del Barça. Ahí se acabó todo. Ahí se acabó el sueño, porque Chino recortó la diferencia a falta de cuatro segundos. Ya era muy tarde.