Este lunes sucedió una desgracia en Villanueva de los Infantes (Ciudad Real) una brutal granizada que ocasionó numerosos daños materiales en toda a la localidad para la que se va a solicitar la zona catastrófica al Estado y a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Uno de los afectados fue el equipo de fútbol sala de la localidad que militan en la tercera división nacional, el Infantes Fútbol Sala. Óscar Díaz, el entrenador del conjunto y Fernando Mena, director deportivo, cuentan como lo vivieron.
Según relatan Díaz y Mena, “empezó a granizar sobre las 20:30 horas y ya estábamos en el pabellón esperando a algunos jugadores para empezar con el entrenamiento y a los 30 segundos de comenzar, pegaba tan fuerte en la chapa del techo del pabellón que no podías hablar con la persona que tenías al lado porque no se escuchaba de lo fuerte que caía el granizo. Además el pabellón tiene goteras y empezó a entrar agua por las goteras y no sabemos que pasará con la pista porque estaba mojada por muchísimos sitios. A continuación pensamos en los coches al escuchar que estaba golpeando tan fuerte el granizo, nos asomamos y vimos muchos coches con lunas rotas, retrovisores, faros, abolladuras, etc. De hecho cuando paró de granizar y salimos a la calle y podías ver pájaros y palomas muertas”.
En cuanto al equipo de fúbtol sala, no cabe duda que hay miembros del equipo que están muy afectados por lo sucedido, “ayer algunos jugadores se fueron muy desanimados a casa, ha sido una desgracia y es normal que estén así”. De hecho esta misma tarde el equipo tiene que disputar un partido de pretemporada ante el Bailén, “al final vamos a ir por el compromiso del club, ayer intentamos no ir y cambiar el encuentro por como se encuentran los jugadores, pero iremos”. El próximo entrenamiento será el jueves, “no sabemos donde vamos a entrenar todavía, si se soluciona el asunto, iremos al pabellón municipal, sino al pabellón del colegio o a unas malas tendremos que ir a un recinto de algún pueblo de al lado”.
El entrenador del conjunto infanteño intentará en la medida de lo posible “tratar de volver a la normalidad lo antes posibles con los jugadores a los entrenamientos porque en dos semanas comienza la liga y los rivales no perdonan”, sentenciaba.