MANZANARES FS 5 |
FS TALAVERA 3 |
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Dani Juárez, Kiki, Otero, Nacho Gil y Pepe -cinco inicial- Chin, Jorge Salcedo, Manu Diz, Pablo Mel, Hitcham y Blecua. | Gonzalo, Asensio, Josete, Caio Alves y Sergio -cinco inicial- Justo Cáceres, Quique Hernando, Jesús Jiménez, Panucci, Anass y Chino. |
ÁRBITROS Botella López y Castillo López. Amarillas a los locales Otero, Manu Diz y Pablo Mel; y a los visitantes Josete y Caio Alves. Roja al local Manu Diz. |
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GOLES 1-0 Pepe (1); 1-1 Jesús Jiménez (1-1); 2-1 Nacho Gil (20); 2-2 Sergio (24); 2-3 Josete (25); 3-3 Jorge Salcedo (31): 4-3 Hicham (39); y 5-3 Pablo Mel (40). |
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INCIDENCIAS Partido de la duodécima jornada en Segunda División, celebrado en el pabellón ‘La Bombonera’ de Manzanares. |
El Manzanares FS Quesos El Hidalgo se llevó el derbi regional frente a Soliss FS Talavera por 5-3 en un intenso y emocionante partido que coloca a los hombres de Rubén Barrios segundos en la clasificación a un solo punto del líder Burela. Ganaron los manchegos, que llevan más de un año sin perder en la ‘bombonera’, pero el choque bien pudo acabar en empate o victoria visitante. El verdadero triunfador de la tarde en el Pabellón Municipal de Manzanares, lleno hasta la bandera, fue el fútbol sala.
El partido se puso muy pronto de cara para los locales. A los pocos segundos, Pepe cabeceó un saque de esquina lanzado por Kiki para subir el 1-0 en el electrónico. El ala está de dulce y suma cinco goles en los últimos tres partidos. Los primeros compases fueron de claro dominio del Manzanares, que dispuso de varias ocasiones para ampliar la distancia en el marcador y obligó a Raúl Aceña a pedir tiempo muerto cuando apenas habían transcurrido cinco minutos. El Talavera pudo por fin deshacerse de la presión asfixiante de los azules y Anass, en la primera pelota que tocaba, a punto estuvo de poner las tablas. Salvó Dani Juárez, soberbio una jornada más bajo los palos. El empate llegó poco después a través de un penalti cometido por Manu Diz (que vio tarjeta amarilla) que transformó Jesús Jiménez por el centro.
La intensidad del partido iba aumentando segundo a segundo y se vio reflejada en el electrónico: quedaban casi seis minutos para el descanso y los dos equipos ya acumulaban cinco faltas. Con el choque ya más igualado, el Manzanares volvió a desnivelar la balanza en el tramo final con un gol de Nacho Gil (ex de Talavera), tras robo de Kiki y una magistral asistencia de Hicham, que tenía reservado su mejor repertorio para el segundo acto. Antes de enfilar el túnel de vestuarios, el brasileño Caio Alves casi empata el partido.
Nada más comenzar la segunda mitad, Nacho Gil volvió a avisar con un tiro al palo, pero fue Talavera, por mediación de Sergio, que se llevó el esférico tras varios rechaces, quien perforó la portería de Dani Juárez. Un minuto después, el meta local y la defensa se vieron sorprendidos por un disparo lejano de falta de Josete que ponía el 2-3 en el marcador. Los visitantes, que voltearon el resultado en apenas un minuto, se hicieron con el mando del partido y tras una clara ocasión de Chino, muy aplaudido por la afición manzanareña, Rubén Barrios se vio obligado a pedir tiempo muerto.
En el 31, Jorge Salcedo tiró de casta y de puntera para batir a Gonzalo y empatar de nuevo el partido (3-3). Poco después, a falta de casi ocho minutos, el Manzanares sumó su quinta falta (muy criticada por la grada) y el partido discurrió ya a tumba abierta hasta el pitido final. Manu Diz cometió la sexta falta y vio la segunda amarilla. Jesús Jiménez tuvo en sus zapatillas el 3-4, pero Dani Juárez volvió a hacerse gigante (la semana pasada ya paró un penalti decisivo en Zaragoza) para desviar la pelota a córner. El Manzanares aguantó con uñas y dientes la inferioridad numérica, con otras dos intervenciones felinas del guardameta madrileño, y al final tuvo su recompensa.
A falta de dos minutos, el marroquí Hicham, que exprime el 40×20 de la pista hasta el último milímetro, volvió a sacar la varita mágica para deshacerse de dos rivales en la banda derecha y batir de un punterazo certero a Gonzalo, que no pudo hacer más que la estatua. Inmediatamente, Raúl Aceña colocó a Asensio de portero jugador, pero este Manzanares es una roca y los visitantes no pudieron encontrar ninguna fisura. A un segundo para que sonara la bocina, Pablo Mel, a puerta vacía, con el público en pie y sus compañeros abrazados y exhaustos por el fragor de la batalla, anotó el 5-3 definitivo, el broche de oro a un partido de los que hace afición.