Viña Albali Valdepeñas y Manzanares FS siguen a la espera de conocer el protocolo sanitario obligatorio y la fecha de inicio de sus competiciones en Primera y Segunda División, respectivamente. En este sentido, este jueves los clubes de ambas categorías por separado han sido convocados de forma virtual por la Federación Española de Fútbol a una reunión, en la que esperan que estas cuestiones queden aclaradas, aunque se mantiene la desconfianza en ello.
En esa espera e incertidumbre, ambos clubes han acogido con total desacuerdo uno de los puntos del nuevo Decreto 49/2020, de 21 de agosto, por el que se modifica Decreto 24/2020, de 19 de junio, y que entró en vigor en la madrugada del sábado al domingo en Castilla-La Mancha. En el mismo se impone que el aforo en las instalaciones deportivas no podrá superar un 75% del permitido todo sentado, con un máximo de 750 personas para la práctica de deportes al aire libre y de 100 para lugares cerrados como los pabellones.
“Estaba incrédulo cuando lo leí, más cuando estoy viendo que en otras cosas se permiten más aforo y que parece que en los pabellones se vayan a contagiar todos”, lamentó Luis Palencia, el presidente del Viña Albali Valdepeñas, que explicó que desde el club, junto con otros, se ha envíado un escrito al Gobierno Regional “solicitando que se valore que haya más aficionados”, apuntó.
Luis Palencia indicó que “somos conscientes de que la situación es complicada, pero en este aspecto hemos dado un paso atrás (antes se permitían 350)”. Para el máximo mandatario del club vinatero al menos se podría permitir “un 50%” del aforo en el pabellón Virgen de la Cabeza, que cuenta con unas 2.000 localidades. “Entendemos que en nuestro pabellón se puede llegar a esa gente siempre con las medidas de higiene y prevención necesarias”, opinó Palencia, que recordó que “con 100 personas es muy complicado poder sacar un proyecto adelante y aquí en nuestro club viven de esto muchas familias”.
También crítico con esta cantidad de aforo se mostró Manuel del Salto, el presidente del Manzanares FS. Su club también había solicitado a la Dirección General de Deportes aumentar ese límite de aforo que estaba establecido en 300 personas en el anterior decreto. Ahora, en el que le ha modificado, son 100. “En vez de subir, hemos bajado. Es un desastre más”, lamentó el mandatario, que quiso incidir en que la aportación de los socios y abonados “es un parte económica muy importante de los clubes”.
El pabellón de Manzanares tiene una capacidad de unas 600 personas y desde el club se pide que, al menos, “podamos contar con un 70% de aforo, unos 400 o 450 aficionados”. “Desde el 17 de agosto empezamos la campaña de socios y a día de hoy no sabemos nada de lo que va a pasar. No podemos ni vender carnets. Lo peor es esta incertidumbre”, concluyó un Manuel del Salto cuyo equipo de Segunda División pretende comenzar el próximo lunes la pretemporada, “pero veremos qué pasa”, matizó en alusión a esa reunión con la Federación que se producirá este jueves.