No se puede decir que descafeinado por lo mucho que hay en juego para ambos. Será el primer derbi en Segunda B que se dispute en el Paquito entre Socuéllamos y Villarrobledo pero tampoco se puede obviar que dada la situación que vivimos y el hecho de que el partido sea a puerta cerrada resta lamentablemente repercusión a este importante partido que puede ser la última oportunidad para ambos de mantener opciones de permanencia en la primera fase del campeonato.
Uno de los protagonistas que mejor nos puede valorar este derbi es el jugador azulón Alberto Escudero, natural de Villarrobledo y bien conocedor del club rojillo tras haber pertenecido a sus filas.
El centrocampista además ha vuelto recientemente a los terrenos de juego después de una lesión que le ha hecho perderse toda la primera vuelta del campeonato y lo ha hecho con sensaciones “buenas y sobre todo ahora con muchas ganas de poder volver a ayudar al equipo. Se ha hecho más largo de lo que pensábamos pero por fin puedo volver a jugar e intentar ayudar al equipo en todo los que se pueda”.
El domingo tienen un derbi por todo lo alto o más bien por todo lo bajo por la situación de ambos equipos, que se juegan la vida. Alberto, residente en la localidad vecina, palpa un ambiente distinto al que se hubiera dado en circunstancias normales.
“No hay el ambiente que debería haber por la pandemia pero seguro que la gente del pueblo tiene ganas al ser un derbi, si hubiese podido ir gente del pueblo hubiese ido bastante”. Ni que decir tiene los llenos que hubieran registrado ambos campos con libertad para entrar gente. “A nosotros nos gusta jugar con cuanto más público mejor, siendo Villarrobledo se hubiera desplazado bastante gente y el partido hubiese estado bastante mejor”.
Suele hablar con Diego Nieves, el año pasado en el Socuéllamos, ahora en Villarrobledo, ambos paisanos aunque “de momento no, con Diego suelo hablar de vez en cuando pero de momento esta semana no hemos hablado” pero en próximos días “a lo mejor le escribo a ver cómo está y cómo lo ve”.
El Villarrobledo ha acometido en este mercado de invierno una importante reestructuración de su plantilla después de dar cinco bajas y seis altas. “Se ha reforzado bien, conozco a Buitrago que estuve con él en Villarrobledo, Ángel Moreno que coincidí con él en el Albacete y son jugadores que tienen experiencia en Segunda B y que van bastante bien” argumentaba.
Los ‘troyanos’ llegarán al derbi del Paquito después de más de un mes sin competir, mientras que el Socuéllamos ya ha jugado en lo que lleva de año un partido de Copa del Rey ante un Segunda División y dos jornadas de Liga, por lo que llega mucho más rodado, mientras los rojillos lo harán más frescos de piernas y con hambre de volver a competir después de tanto tiempo pero faltos de ritmo, lo que les puede pesar, en este sentido Alberto piensa que “no lo sé, no sé si les vendrá bien o no, lo que está claro es que a todo el mundo nos gusta tener el ritmo de competición y jugar cada semana pero quizá con lo de llevar tanto tiempo sin competir les hace dar ese plus y esa motivación extra que a lo mejor hace falta”.
Este derbi es más que una final a pesar de llegar a estas alturas. El Socuéllamos con algo más de ventaja aunque el Villarrobledo cuenta con dos partidos menos que deberá disputar en casa, pero el que pierda quedará muy tocado. Caso de hacerlo el Socuéllamos dejaría al Villarrobledo prácticamente hundido y de ganar los de Edu Pérez en el Paquito se engancharían y lograrían un golpe moral muy importante, provocando el efecto opuesto en los socuellaminos, que pasarían a tener una situación enormemente delicada.
“Nosotros nos tomamos cada partido como una final, que es lo que nos toca ahora. Tenemos que hacernos sobre todo fuertes en casa y sacar todos los puntos, nos tenemos que quedar con eso, salir siempre a competir, a darlo todo y a ganar cada partido, es lo que tenemos que hacer ahora” concluía.