Darío Martín, entrenador del Villarrubia, valoró el empate a uno ante el Toledo como un resultado justo en un partido con pocas ocasiones claras. “El empate ha sido justo, no hubo muchas oportunidades para ninguno de los dos equipos. Hubo un penalti, una ocasión del Toledo, un par de disparos nuestros y el gol. No creo que haya mucho más que decir en cuanto a ocasiones”, expresó el técnico, quien destacó el esfuerzo de sus jugadores, especialmente en la segunda mitad.
Martín admitió que su equipo no comenzó bien el encuentro y se mostró satisfecho con la capacidad de sus jugadores para reorganizarse y reaccionar. “No hemos entrado bien al partido, nos ha pasado otras veces y hoy el equipo ha decidido juntarse cuando no se ha encontrado cómodo. Poco a poco, nos fuimos soltando y quitándonos ciertos miedos. En la segunda parte decidimos apretar alto, asumiendo que si no lo hacíamos, no íbamos a empatar ni ganar. Prefería arriesgarme a perder 4-0 que quedarnos atrás sin opciones”, explicó el técnico, resaltando la valentía de su equipo.
Sobre la calidad del Toledo, Martín reconoció el potencial de su rival y enfatizó la importancia de que su equipo juegue sin miedo. “El Toledo es un equipo ganador, en su campo cualquiera lo tiene difícil para ganarles. Pero en el descanso dije a los jugadores que no hay que tener miedo, que nosotros también somos buenos, jóvenes y con hambre. Si no tenemos actitud y ganas en un estadio como el Salto del Caballo, nunca subiremos de categoría”, subrayó, motivando a su equipo a dar la talla en escenarios exigentes.
El entrenador también reflexionó sobre la dificultad de la categoría y las diferencias presupuestarias entre los equipos. “En esta categoría, aunque algunos tengan algo más, no hay tanta diferencia como en la Segunda RFEF. Aquí, el que está bien preparado puede competir. Los equipos están cada vez mejor trabajados y no es fácil ganar si no estás en un buen nivel. En el fútbol, o estás bien o no ganas. El Toledo es lo que esperábamos, teníamos claro que queríamos dificultar su salida de balón y nos preparamos para ello, pero ellos también hicieron ajustes y nos complicaron en algunos momentos”, detalló.
Finalmente, Martín explicó cómo el Villarrubia ajustó su planteamiento durante el partido al observar algunos cambios en el Toledo, especialmente en la posición de su mediocentro Reguera. “Reguera se quedaba más adelantado y eso nos cambió el planteamiento inicial. Nos replegamos un poco más y apretamos cuando el balón salía a los laterales. Los primeros 30 minutos, ellos estuvieron más sueltos y nos costó llegar. Sin embargo, después del gol, nos decidimos a quitar un defensa e ir más al hombre, con lo que asumíamos el riesgo de perder por 2-0. Pero estábamos encontrándonos cada vez mejor y, al final, el empate llegó. Fue un esfuerzo colectivo que nos permitió igualar el marcador”, concluyó Martín, satisfecho con la reacción de su equipo.