Si el Almagro pone un circo, le crecen los enanos. El final de la pretemporada y el comienzo de la liga han sido aciagos. A la metedura de pata de la semifinal de la Copa Diputación, con la alineación indebida de Alexis, le sucedieron todas las lesiones, ninguna muscular por cierto, que hicieron que el equipo llegara en cuadro al primer encuentro liguero en Tarancón. La caraja con la que el Almagro saltó al campo se saldó con un 3-0 en 20 minutos. Remontaron los rojillos, pero se quedaron con nueve y los conquenses lo aprovecharon para hacer un 4-3 que escuece. Con todo, no fue eso lo peor. Lo peor es que Diego Prado se rompió a los cinco minutos de saltar al campo. Le había dado tiempo a ceder a Ferrán para que anotara el 3-2 antes de que le cayera un rival en la rodilla y se quedara casi sin temporada. Porque el talaverano sufre una de las peores lesiones para un futbolista: rotura del cruzado. No está confirmado, porque hasta el lunes no le hacen la resonancia, “pero es seguro. El médico que le vio lo afirma al 100%”, según comenta el míster almagreño, Kiko Vilches.
El jugador había tenido una pretemporada accidentada por culpa de un esguince de tobillo de la pierna contraria en la que ahora ha sufrido la lesión. En principio no hay ninguna relación entre ambas, pero está claro que Diego Prado, en el que había puestas muchas esperanzas, no ha tenido suerte en su llegada al Trujillo. “Estamos jodidos”, dice Vilches, “porque es un jugador importante y un tío muy querido por su forma de ser”. En principio, no está previsto sustituirlo. “Vamos a tirar con lo que tenemos. Al menos hasta diciembre. Si por entonces vemos que hay necesidades, lo estudiaremos”, apunta Vilches.
Hay que recordar que la pasada temporada fue Rivero, que acaba de reaparecer, el que se lesionó de larga duración, ya que se rompió el tendón de Aquiles.
Sin intensidad
En cuanto al encuentro de la pasada jornada, Vilches estaba muy molesto con el comienzo de su equipo. “Salimos sin la intensidad necesaria atrás. Esta temporada tenemos mucha más pólvora arriba, pero los problemas con las lesiones hizo que los jugadores más intensos a la hora de defender no estuvieran disponibles y lo notamos”, comenta el talaverano, que ya prepara el choque la próxima jornada, nada menos que ante el Toledo. En él no estará Diego Prado, claro. Tampoco Carlos Ramos. Y probablemente haya alguna baja más. Las lesiones, esa parte del juego que casi siempre se olvida.