El Almagro viaja este domingo a Quintanar del Rey (18.30 horas, dirigido por Tercero Campos) con el único objetivo de rascar algo positivo. Consciente de la dificultad y muy mermado por las bajas, el equipo de Kiko Vilches viaja con la intención de competir y traerse algún punto para resarcirse de esa derrota del pasado domingo ante el Villarrobledo.
La semana ha transcurrido con normalidad por el Manuel Trujillo mientras el cuerpo técnico espera que se recupere el bueno de Astillero, lastimado de una vértebra tras un choque fortuito. Tampoco estarán en la cita ni Diego Prado ni Giti, ambos lesionados, mientras que Yerai ha trabajado entre algodones.
“Hemos tratado de corregir errores. Fue una pena la derrota del domingo pasado porque cuando mejor estábamos vino el segundo del Villarrobledo y nos mató. El equipo se ha dado cuenta que puede competir contra cualquiera”, explicaba Vilches en la previa del encuentro.
Está claro que este Almagro puede competir contra cualquiera tal y como demostró hace un par de semanas ante el Toledo, pero viajar a San Marcos siempre es una tarea complicada y, más aún, ante un equipo como el Quintanar del Rey con la vitola o el sello de José Luis Sepúlveda que, para colmo, llega herido tras encajar una goleada en el Paquito Giménez.
“El Quintanar ha hecho un equipo para estar arriba con un centro del campo jugón y con buenos delanteros como Caín, Verdú y Salcedo. Además, se ha reforzado bien con hombres como Barea. Y todo ello dirigido por un gran entrenador como Sepúlveda. Esperemos rascar algo positivo porque tenemos un calendario muy complicado para cuando vengan equipos de nuestra liga”, indicaba el mister del Almagro.
Por ello, “espero un equipo con las líneas muy juntas, que quiere tener un poquito el balón y más protagonismo que otros años. Como marquen gol es un equipo muy difícil de remontarle. Por eso, espero que será un partido muy disputado y con pocas ocasiones”, vaticinaba Kiko Vilches.