La formación para porteros es una disciplina deportiva muy específica que no suele encontrar refrendo a lo largo del año, ya que no hay entrenadores exclusivos que puedan dedicar dos días en semana para entrenar solamente a estos jugadores. Con el campus de verano se pretende mejorar la técnica de los guardametas con ejercicios específicos, al tiempo que se compatibiliza con actividades más lúdicas como pruebas de puntería y la batalla de porteros. Los 14 jóvenes, entre 5 y 15 años de edad, que participan en esta actividad estival también tendrán un día de asueto en el Aquapark de Ciudad Real.
Así lo explicó José Antonio Castellanos, director del campus, quien también comentó que la formación no se ha limitado exclusivamente al aspecto físico, también al psicológico, “tendrán también la visita de psicólogos deportivos que les enseñarán a comunicarse con la defensa, a que aprendan a reponerse de los errores y a concentrarse, algo que es fundamental para los porteros”.
Es el segundo campus de porteros que se celebra en Alcázar, aunque el primero que se realiza durante el verano, con el fin de facilitar también la conciliación de la vida laboral y familiar del entorno de los jóvenes. “Los campus de verano contribuyen a la conciliación y a formar en valores a nuestros niños y niñas, además de ser una experiencia lúdica”, comentó la alcaldesa alcazareña, Rosa Melchor, que visitó este el último campus deportivo del verano.
A lo largo del mes de julio se han desarrollado en la ciudad campus deportivos de fútbol, baloncesto, gimnasia rítmica, multi-deporte, tenis de mesa y ajedrez, además del específico para porteros.
