Chicastro
Puertollano
Una vez más, el Club Deportivo Puertollano sucumbió a domicilio. El equipo industrial se ha empeñado este año en hacer los deberes en casa y ante su afición y dejar los partidos de fuera para otras ocasiones más oportunas. No le están viniendo de cara las cosas al equipo de Andrés Viñas cuando juega lejos del Cerrú. Si no es la suerte son las sanciones. Y si no, las lesiones.
El pasado domingo, ante el Toledo B, el Puertollano sufrió un cúmulo de circunstancias negativas para volverse de vacío a casa. Para empezar, vio cómo muy temprano se le ponían las cosas muy difíciles con un gol en contra. Pero fue Abdón el que antes del descanso dio emoción al encuentro. Ya en la segunda parte, los azules lo intentaron, pero el marcador fue demasiado abultado como para lograr la épica. Porque dos goles seguidos, los que supusieron el 2-1 y el 3-1, fueron un jarro de agua fría para un equipo que lo intentó, pero que no pudo. Ya en el último suspiro, el filial verdiblanco puso el definitivo 4-1 y dejó a los azules muy tocados, y más aún cuando Paco Ríos vio la segunda amarilla y tuvo que marcharse a vestuarios, lo que supuso dejar a su equipo con un hombre menos y para el partido del domingo ante el Villarrubia con un defensa menos.
Por lo tanto, nada pudo hacer un Puertollano que viajaba plagado de bajas a la ciudad minera. Rodri, Culebras, Valdivia, Casero y Huertas se quedaron en el dique seco y tendrán que recuperarse cuanto antes para ayudar al equipo que tanto está pagando todas estas circunstancias.
Con la derrota ante el Toledo B, el Puertollano suma ya cinco partidos a domicilio sin conocer la victoria. El último triunfo fue allá por el mes de septiembre ante La Gineta. Desde entonces, sólo algún empate ha podido rascar el equipo de Andrés Viñas. Menos mal que el equipo ha apelado al Cerrú y a su hinchada para sacar los puntos y acercarse a esa permanencia que cada día está mucho más cerca por los resultados del Gimnástico de Alcázar y La Gineta, entre otros.
Sin lamentos
Y sin tiempo para lamentarse, el Club Deportivo Puertollano volvió ayer a los entrenamientos para preparar el partido de Copa Federación ante el Castellón, choque de ida que se jugará este miércoles a partir de las 20 horas en el Nuevo Cerrú.