Parece que poco a poco, una competición ‘molesta’ al principio, donde hay más que perder (lesiones, acumulación de minutos en las piernas de los jugadores, largos desplazamientos y gastos) que ganar (los premios económicos no entran hasta semifinales) comienza a tomar su relevancia.
La U.D. Socuéllamos tiene ante sí la oportunidad de llegar a esos citados cuantiosos premios, cosa que se ve tan lejos al principio, pues primero hay que ganar la competición a nivel regional y después pasar tres rondas a nivel nacional ante equipos de Segunda B, encontrándose a un solo paso de conseguirlo y de hacer además historia llegando por primera vez a las semifinales de esta competición.
En la anterior ocasión que el equipo llegó a cuartos de esta competición fue en la temporada 2016-17, el año del descenso de Segunda B, donde cayó eliminado por el Atlético Saguntino. Nunca antes habían llegado tan lejos cuando ahora deberán jugar con un resultado ligeramente favorable pero peligroso, porque obliga a ganar el partido de vuelta tras el 0-0 de la ida.
Para ello, el Paquito Giménez jugará un papel fundamental, por la afición y por la fiabilidad del equipo en casa, donde apenas encaja goles y solo ha perdido un partido, 0-1 ante Marchamalo, el resto han sido todo victorias, lo que daría la clasificación en esta cita.
Su rival, la A.D. Ceuta, es uno de los conjuntos más potentes del grupo 10, que tras tres derrotas en los últimos cuatro partidos de Liga, se ha caído de los puestos de play off de ascenso.
Al conjunto ceutí le tocará esta vez hacer frente al largo desplazamiento para afrontar el partido, lo que siempre afecta al físico de los jugadores.
Mario Simón cuenta con la baja de Essomba por acumulación de amonestaciones y la duda de Megías por problemas físicos que ya le impidieron jugar el domingo ante La Roda.
El colegiado del encuentro será Cuesta García-Muñoz del colegio castellano-manchego.